«Si alguien pagó por un niño, que le cuente la verdad»
Las familias afectadas por la supuesta venta de recién nacidos en el hospital de Cádiz se manifiestan contra el archivo de sus denuncias
CÁDIZ.Actualizado:Unas 150 personas, afectadas por los supuestos robos de recién nacidos en los hospitales gaditanos durante el franquismo, se manifestaron en la tarde de ayer ante las puertas de la Audiencia Provincial de Cádiz, en la Cuesta de las Calesas, para protestar por el archivo de varias de las denuncias que se han interpuesto hasta ahora.
«Queremos que los casos sigan en los juzgados, que se investiguen y que no se archiven; pero también queremos hacer un llamamiento a aquellos padres que pagan por un niño, que sepan que la adopción es gratis, y si alguna vez lo hicieron que le cuenten la verdad a sus hijos», aseguraba ayer ante los medios de comunicación Chary Herrera, presidenta de la asociación SOS Bebés Robados Cádiz, que convocaba la concentración ante la Audiencia. Un día antes, una protesta similar se había celebrado en Madrid frente a la Fiscalía General del Estado.
En los juzgados de Cádiz, los jueces de instrucción han recibido hasta ahora 15 denuncias de bebés robados, 13 presentadas por la Fiscalía y dos por particulares. Otras muchas siguen todavía en manos de los fiscales. En lo que va de año se han sobreseído cinco de estas causas, aunque dos fueron reabiertas por la Audiencia en junio y los otros tres archivados, ya han sido recurridos por una doble vía -ante la Audiencia y el juez de instrucción-. En los juzgados de La Línea, en cambio, el proceso va mucho más avanzado: al menos siete casos de afectados -de los más de cien que existen- ya está en manos de los jueces, que han comenzado a investigar y a llamar a declarar a algunas familias. «Aquí vamos más retrasados, la Fiscalía ha hecho su trabajo, pero los jueces nos están fallando», reconocía el abogado de la asociación, Martín de la Herrán, que lanzaba un mensaje a los jueces: «Aquí no se hace daño por hacer, sino por no hacer».
Mientras, sobre las escaleras de acceso del Palacio de Justicia, los concentrados colgaban pancartas y voceaban consignas pidiendo «¡justicia!». «Menos desahucios e investiguen nuestros casos», rezaba uno de los rótulos. «¡El secuestro no prescribe!», decía otro, ya que según la asociación, los bebés han sido víctimas de detenciones ilegales, un delito que «no caduca hasta que no aparece el secuestrado». Los jueces, en cambio, consideran que los robos (de los años 60, 70 y hasta los 80) ya no son enjuiciables. Por su parte, la Fiscalía de Cádiz ha logrado reabrir dos de las investigaciones con una interpretación intermedia: el delito sí prescribe, pero al cometerlo funcionarios (como médicos y enfermeras), el plazo se alarga y aún no se ha cumplido.
Como en concentraciones anteriores, las familias iban cargadas con carpetas llenas de legajos y cuantas pruebas han podido recopilar. Pero sobre todo, con un hambre voraz por contar las sospechas que han rumiado durante años en silencio, ya sea por ignorancia o por miedo a ser tachados de paranóicos. Ahora saben que no están solos. Por eso, muchos abordaron ayer a cuantos periodistas acudieron, para contar sus historias. Todas parecidas: «Busco a mi hermano y a mi hermana, gemelos nacidos en 1967», contaba una mujer. «Yo busco a mi hija», decía por su parte José López, de Rota, que la perdió en el 75. «Nos enseñaron a una niña que no era la nuestra; mi mujer siempre lo supo». Ahora solo quieren saber la verdad.