campaña de la venidimia

La plaga de mildiu se hace fuerte en las viñas del Marco de Jerez

La producción, que alcanza ya los 40 millones de kilos, se puede ver mermada por la acción de este hongo que seca la uva

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. La amenaza del mildiu se ha vuelto real en el Marco de Jerez. Los viticultores de la zona se han encontrado más cepas afectadas por este hongo de las que en un principio se pudo vaticinar y la producción se puede ver mermada por sus efectos. Hasta la fecha no se sabe qué porcentaje de la cosecha podría perderse a consecuencia de la plaga pero sin duda será uno de los factores que hagan reducir la cantidad media de uva por hectárea en la presente campaña.

«Nos estamos dando cuenta de que el mildiu ha hecho al final bastante daño», certificó el presidente de Asevi, Francisco Guerrero, al respecto. El mildiu es un hongo que ataca a la vid y que se extiende con facilidad con ciertas condiciones de temperatura, humedad y tamaño del brote. Es, sobre todo, la segunda de ellas la que facilita más su propagación. «No hay productos que sean de verdad curativos contra el mildiu. Lo pueden frenar pero no lo curan del todo», contó Guerrero, experimentado en estas lides.

La única opción del viticultor es el tratamiento preventivo para evitar que el hongo penetre en las hojas pero la situación económica de los productores no ha sido la mejor este año para afrontar grandes gastos. «El viñista tiene un agujero en el bolsillo y procura gastar menos ahorrando en algunos tratamientos», contó Guerrero. Si a eso se le unen las inesperadas lluvias de la pasada primavera, las temperaturas y la consiguiente humedad, el riesgo de mildiu en los campos es elevado.

Pero el mildiu no ha llegado solo a las viñas del Marco. Lo ha hecho acompañado de otro hongo, el oidium. De hecho, este último es aún más corriente que el mildiu en las tierras jerezanas y, además, más peligroso para el cultivo.

Los efectos del oidium pasan por debilitar la piel de la uva hasta resquebrajarla. El jugo del fruto queda entonces al descubierto y la uva termina por pudrirse a consecuencia de la botrytis cinerea o podredumbre de Botrytis. Y para colmo, este hongo puede resistir en la cepa hasta el año que viene, de modo que sus efectos nocivos se pueden trasladar a la próxima cosecha.

A pesar de estos dos visitantes indeseables, en general la sanidad de la cosecha a estas alturas de la campaña es buena. Según informaba ayer el Consejo Regulador, la graduación media de los frutos alcanzan los 11,82 grados baumé.

Consecuencias

En el aspecto agrícola, el mildiu provoca que la uva se seque y que, por tanto, no quede apta para recoger. Pero esta consiguiente disminución de la producción tiene otros efectos y el principal de ellos es el económico. Para los propietarios donde la plaga se ha cebado, las pérdidas son lógicas puesto que se han invertido recursos que finalmente no se verán recompensados.

Contrario es el efecto para el mercado en general, ya que una menor cosecha reduce los excedentes y provoca, por tanto, que el sector remonte. «Las existencias acumuladas se irán agotando y la crisis del Marco de Jerez podrá terminar antes de lo previsto», explicó el presidente de Asevi.

Se trata de una consecuencia a medio plazo puesto que la propagación del mildiu no tendrá nada que ver, en principio, con que suban los precios que las bodegas pagan a los productores. «Van a rondar los límites del año pasado. Quizás suban algo los mínimos pero no van a crecer los máximos», indicó el responsable. Todo parece indicar que las firmas bodegueras volverán a ofrecer los mismos precios a sus viñistas. No se trata de una buena noticia ya que «el año pasado los viticultores perdimos dinero».

Recta final

Aún quedan varios días para dar por terminada oficialmente la vendimia 2011 pero el final ya se vislumbra en el horizonte. Sobre todo, las grandes firmas apuran los últimos días de recogida esta semana mientras que la semana que viene y la siguiente quedarán pagos más pequeños de la zona de la costa. «González Byass está a punto de terminar y Beam Global (antigua Domecq) lo hace hoy –por ayer–», resumió Guerrero. Siguen en plenas labores en Barbadillo porque su vendimia es más larga mientras que «a Trebujena y Sanlúcar tampoco le queda mucho», certificó el responsable de Asevi.

El propio Consejo Regulador corrobora con datos sus palabras. Hasta ayer, jornaleros y máquinas han recogido en el Marco de Jerez 40.133.650 kilos de uva, lo que supone cerca del 65% de la producción esperada para esta campaña. Hay que recordar que las previsiones marcan entre 60 y 63 millones de kilos.

En total, son 25 (del total de una treintena) los lagares que están funcionando en la comarca. De las localidades que forman parte de la Denominación de Origen (D.O), solo Chiclana y Puerto Real faltan por incorporarse a la recogida de la uva. Jerez es el primer municipio del ránking con más de 30 millones de kilos molturados, seguido aunque a distancia por Trebujena –con 6,5 millones– y Sanlúcar de Barrameda, con casi tres millones.

Aún así, es difícil todavía prever el final concreto de la campaña puesto que la Agencia Estatal de Meteorología ha anunciado lluvias para el jueves, lo que podría interrumpir la campaña hasta que se pueda de nuevo trabajar en los campos de la comarca.