El fondo luso Megafinance descarta invertir en el capital de Nueva Rumasa

La sociedad de inversión portuguesa Megafinance ha asegurado que ya no tiene interés en entrar en el capital de Nueva Rumasa, influida por el proceso judicial por supuesto fraude al que se enfrentan el administrador y un consultor de la empresa lusa.

Así lo confirmó a Efe un portavoz de la compañía, quien precisó que la decisión de acabar con las conversaciones sobre Nueva Rumasa se explica, además de por los problemas judiciales de Megafinance, por «la situación propia» del grupo español.

Hay que recordar que la firma de capital de riesgo lusa anunció hace seis meses su interés en negociar con Nueva Rumasa, en la que deseaba entrar a través de una alianza de inversores con cerca de 70 millones de euros.

Las empresas pertenecientes al grupo propiedad de la familia Ruiz-Mateos se encuentran actualmente en concurso de acreedores inmersas en procesos de insolvencia, entre ellas sus principales marcas (Clesa, Carcesa o Dhul), además de sus compañías hoteleras.

Las relaciones entre ambas firmas a punto estuvieron de romperse entre finales de junio y julio, después de que los responsables de Nueva Rumasa negaran que se hubieran reunido con representantes de Megafinance en Lisboa, extremo que la compañía lusa siguió dando como cierto.

Sin embargo, un portavoz de la firma portuguesa aseguró que la intención de participar en Nueva Rumasa continuó «hasta hace al menos tres o cuatro semanas».

El consultor de Megafinance, Pedro Xavier Pereira, fue acusado la semana pasada en Portugal de un caso de fraude en el que también se ha visto envuelto el presidente de su consejo de administración, Luís Valente.

Denuncia

Los dos fueron denunciados por varios empresarios que aseguran haber sido estafados por Megafinance, con la que contactaron para resolver sus problemas de insolvencia y reestructurar sus deudas, y que les llevó finalmente a firmar un «acuerdo ruinoso».

Actualmente Pereira se encuentra en prisión preventiva, mientras que a Valente se le ha prohibido salir el país y contactar con el resto de sospechosos, según informan desde medios lusos.

Fuentes de Megafinance señalaron que, pese a este procedimiento judicial, la firma de inversión mantiene su interés en varios negocios portugueses, entre ellos los supermercados AC Santos.

El paso atrás de la compañía lusa ha cortado de raíz las ilusiones que había transmitido al alcalde de Caldas, Juan Manuel Rey, a los trabajadores de la planta gallega de la marca lechera Clesa, de Nueva Rumasa, sobre el interés de un grupo en hacerse con la factoría. En este sentido, el comité de empresa y el regidor no quisieron citar el nombre del grupo interesado al estimar que podía perjudicar las negociaciones, pero Rey precisó que «hay interés y a este problema se le dará una solución». El administrador concursal presentó un ERE de extinción para los 150 trabajadores de la planta de Clesa en Caldas el pasado 4 de agosto con un plazo de 30 días para que sea efectivo.