La autopsia descarta que la mujer fallecida en Murcia sea por violencia de género
Su marido, que había sido detenido por una supuesta agresión, declaró que ésta se había caído por las escaleras la noche anterior, propinándose un fuerte golpe en la cabeza
LIBRILLA Actualizado: GuardarEl análisis forense preliminar realizado a la mujer fallecida ayer en Librilla (Murcia) concluye que la muerte no se produjo por hechos violentos, según ha informado la Delegación del Gobierno, que ha añadido que "posteriores análisis permitirán determinar los motivos de la misma".
Al mediodía de ayer la Guardia Civil halló una mujer muerta en un domicilio con indicios de violencia en su cuerpo y a las 21.30 horas procedió a la detención del compañero sentimental como supuesto autor del delito de homicidio debido a los indicios obtenidos en el lugar de los hechos, si bien, ante el resultado de la autopsia, éste será puesto en libertad en las próximas horas.
La detención se produjo al presentar la fallecida numerosos hematomas en rostro, extremidades y cuerpo, en diferentes estados de evolución, a pesar de que el marido había explicado que su esposa se había caído por la escalera del edificio.
Fuentes cercanas a la investigación aseguran que la pareja, con un hijo de 10 años en común, conformaba una familia desestructurada y con serios problemas de alcoholismo. La Policía Local de Librilla ya había sido testigo en múltiples ocasiones de constantes peleas y agresiones mutuas entre la pareja, de las que normalmente ella salía peor parada. Paloma, de 44 años de edad, no había interpuesto ninguna denuncia y por tanto tampoco había establecida ninguna orden de protección o de alejamiento.
Su cuerpo parecía "un mapa"
La Policía revelaba ayer que el cuerpo de la fallecida parecía "un mapa", pero se desconocía el origen de los golpes. La primera alerta sobre este suceso la dio ayer el mismo marido de la víctima, al telefonear al servicio de Urgencias de la localidad solicitando un médico para su compañera. Según relató, ésta se había caído por las escaleras la noche anterior, dándose un golpe, que por la mañana le había provocado fuertes dolores. Este vecino aseguró que había insistido en llevarla al centro de salud, pero que ella se negó.
Dado su empeoramiento, optó por llamar a Urgencias. Era tarde. A la llegada del equipo sanitario al domicilio, el médico se percató de que nada podía hacer ya por salvar la vida de la mujer. El cadáver presentaba cardenales en la parte izquierda de la mandíbula y en el pecho, además de en otras partes del cuerpo. Ante las evidentes señales, el facultativo dio aviso de inmediato a la Policía Judicial de la Guardia Civil, para que investigase lo ocurrido.
Tras proceder al levantamiento del cuerpo, los agentes de la Benemérita revisaron la vivienda en compañía del marido. Al término de la inspección, éste fue conducido al cuartel, donde se le tomó declaración.
