Zapatero adelanta dos días su regreso a la Moncloa desde Doñana

José Luis Rodríguez Zapatero adelantó dos días el fin de sus vacaciones. El presidente del Gobierno abandonó ayer el Palacio de Marismilla, su residencia vacacional en el coto de Doñana, y regresó al Palacio de la Moncloa con el objetivo de incorporarse a su despacho hoy por la mañana.

No se trata de un desplazamiento ocasional sino de que el jefe del Ejecutivo dio por terminado su período de descanso estival, que en principio iba a acabar el próximo jueves, el día en que a las doce del mediodía recibirá en el aeropuerto de Barajas al papa Benedicto XVI, que acude a España para presidir los actos centrales de la Jornadas Mundiales de Juventud (JMJ).

Zapatero inició oficialmente sus vacaciones el 2 de agosto por la tarde, pero al día siguiente tuvo que regresar a Madrid desde Doñana para ponerse al frente de su equipo económico ante la reiteración de los graves ataques de los mercados a la deuda española, que hicieron que la prima de riesgo llegase a superar los 400 puntos y provocaron el hundimiento de los valores bursátiles. Entre el martes y el viernes Zapatero estuvo a caballo entre ambas localidades, para conversar con los principales líderes continentales y los responsables de la UE para adoptar acuerdos urgentes que tranquilizasen a los grandes operadores financieros.

Polémica política

El 6 de agosto se marchó definitivamente a su lugar de veraneo, donde ha permanecido durante diez días, pero en contacto con los responsables económicos gubernamentales, que, entre otras cosas, preparan una batería de decisiones para cumplir con el objetivo de reducción del déficit español hasta el 6% a final de año, y que se aprobarán en los Consejos de Ministros a celebrar los días 19 y 26 de este mes. La agenda oficial de Zapatero para esta semana, al menos hasta ayer, solo preveía la recepción al pontífice, una entrevista con él el viernes por la tarde y la presidencia del Consejo de Ministros de esa misma mañana.

La vuelta al trabajo del presidente del Gobierno coincide con el día en que Nicolas Sarkozy y Angela Merkel se reunirán en París, dentro de la cumbre franco-alemana, en una cita en la que se espera que diseñen la respuesta europea a la crisis financiera y lo que debe ser un modelo futuro de mayor gobernanza económica comunitaria.

Las vacaciones del presidente, así como las del líder de la oposición, Mariano Rajoy, protagonizaron el debate político de la semana pasada. El PP criticó su ausencia de la Moncloa cuando muchos líderes europeos ya estaban en sus despachos para afrontar las turbulencias financieras y pidió su regreso inmediato y su comparecencia en el Congreso. Los socialistas contestaron que, de hecho, Zapatero fue el único mandatario europeo que retrasó sus vacaciones para afrontar la crisis y que estaba en su puesto cuando los que ahora han regresado ya descansaban. Además, recordaron que el primero en irse fue Rajoy, que está en Sanxenxo (Pontevedra) desde el 29 de julio y que, salvo sorpresas, retornará a la calle Génova de Madrid el próximo viernes 19 de agosto.