«Es mi momento y Belén Esteban lo sabe»

Qué necesidad tengo yo de ir a la isla?». Es la pregunta que rondaba la cabeza de Rosa Benito (Alicante, 1956) días antes de volar a Honduras para formar parte de 'Supervivientes'. Se despertaba a las cuatro de la mañana acechada por los miedos de lo que se le avecinaba. Besaba a su hijo de 14 años y se preguntaba por qué había dicho que sí. «¡Qué loca estoy!». El final de doce semanas de supervivencia le han hecho entender que la isla le hacía más falta de lo que podía imaginar.

Ya era popular gracias a su silla en 'Sálvame', pero se fue siendo la 'mujer de', la 'madre de' y, cinco años después de la muerte de Rocío Jurado, la 'cuñada de'. Y regresó a España como Rosa Benito. La revelación veraniega de Telecinco y de todo el mundo del corazón. Porque ella es la ganadora de la edición más vista del 'reality'. Una edición que ha convertido a la cadena de Vasile desde junio en la líder sin discusión, un título que TVE poseía desde el verano de 2010.

Y hablando de cambios. Rosa también ha acabado, al menos temporalmente, con otro liderazgo. El que ejercía 'la princesa del pueblo'. Belén Esteban ha perdido presencia en las revistas y minutos -perdón-, horas de televisión en favor de su amiga.

Benito era una colaboradora más, 'la benenito', que de vez en cuando tomaba protagonismo gracias a las riñas de la familia Mohedano por la herencia de su cuñada y por los dimes y diretes de su hija Rosario con su expareja y padre de su primer hijo, Antonio Tejado. Tenía el papel secundario de la película de su vida, dentro y fuera de los platós.

En la isla se percató de ello y se confesó ante la 'stripper' Tatiana Delgado, «mi Tatiana», la tercera clasificada del 'reality'. Una revelación que repitió ante un plató que enmudeció. «Lo único que he hecho en mi vida es criar a mis hijos y cuidar de mi marido, de lo que estoy orgullosa. Pero a mí, ¿quién me ha cuidado?».

Es el retrato de una generación de mujeres de otra época. Casadas jóvenes, madres jóvenes, de las que no se esperaba otra cosa.

El apoyo de la audiencia y de sus compañeros la han aupado a un lugar del que va a ser difícil bajarla. De Honduras ha vuelto una Rosa sin miedos y con ganas de darle un cambio a su vida, tanto en lo personal como en lo profesional. «Antes iba a mi trabajo temblando, pensando en lo que me iban a poner. El lunes fui tranquila. A partir de ahora no me voy a callar nada».

Dieciséis kilos menos

El paso por 'Supervivientes' no solo la ha despojado de sus complejos, sino también de dieciséis kilos.

Para entender el cambio de 'La benenito' hay que echar una mirada a su pasado. Corría el año 1972 cuando una Rosa de 16 años y melena morena se hacía con la banda de Miss Costa Blanca, lo que la llevó a la pasarela de Miss España. En ese mundillo no encontró la fama y finalmente se hizo peluquera. Amante de la copla, su trabajo la permitió conocer a 'la más grande' y a su hermano, Amador Mohedano, que quedó prendado de su belleza. El noviazgo duró poco más de un año. Como cuñada de Rocío Jurado, además de su peluquera, pasó a ser su ayudante y confidente. Una estrecha amistad que derivó en un parecido físico acentuado con los años.

A la tele llegó para defender a su hija, concursante de 'Gran hermano VIP' en 2004, y continuó comentando otros 'realities'. Su colaboración con Telecinco tomó especial relevancia cuando la cantante enfermó en 2006, como portavoz de la familia.

Más allá de lo que la desaparición de un ser querido entraña, la muerte de Rocío supuso para el clan Mohedano la pérdida del sustento familiar. Trabajar en la tele se convirtió entonces en una necesidad. «Nos venía muy bien el dinero que ganaba, la vida es así. En 'Sálvame' encontró una familia sincera, aunque también ha sufrido mucho. Le he dicho que lo deje muchas veces, pero no ha querido», confesó su marido en una de las galas de 'Supervivientes'.

Desde que ganó, los rumores de lo que cobra o deja de cobrar por ese trabajo la persiguen. Que si 4.000 euros por 'Sálvame, que si 800.000 por 'Supervivientes'...

De todas formas, no piensa esperar para darse el primer capricho y planea para este mismo verano un viaje a Disneyworld Orlando (EE UU), donde irá con sus dos Amadores, su hijo menor y su marido. Una escapada que le permitirá alejarse de los que quieren sacar tajada de su éxito.

Manoli Cuello es una de ellas, la falsa amante de Amador, según ha certificado una prueba ante el polígrafo en 'Enemigos íntimos'.

Ortega Cano

Sin comerlo ni beberlo, y nunca mejor dicho, Rosa se convirtió en la gran protagonista de la isla por el morbo que despertó si la informarían o no sobre el estado de salud de Ortega Cano tras su accidente de tráfico.

En estos momentos casi todo en Telecinco gira entorno a Rosa y a su familia. Problemas entre los Cano-Mohedano, las supuestas amantes de Amador, si sabía o no sabía que su cuñado había estado al filo de la muerte... Están en boca de todos y para poder dar réplica a los comentarios están pendientes de todos los programas de la cadena.

Asuntos pendientes y los que este verano seguirán sumándose al tirón de Benito y compañía. Porque vendrán, siempre y cuando sigan asegurando el liderazgo de la cadena que le ha devuelto su juventud. Otras cuestiones, más triviales, también quedan por resolver después de tres meses naufragando. «El otro día salí a cenar y cogí un trozo de paté con las manos. Me tengo que quitar esa costumbre».