PARTIDA GANADA

Todo empezó en junio de 2010. El Cádiz baja de nuevo a Segunda B. Segundo descenso en tres temporadas. El señor Muñoz dimitía como presidente del Cádiz, pero, como todo el mundo sabe, continuaba como máximo accionista. Por delante, un verano movido. El club entra en concurso de acreedores, sin presidente, sin director deportivo (tras la marcha del nefasto Julio Peguero), y para colmo, con la celebración del Centenario por delante. Caos total.

En estas circunstancias, suele haber alguien que siempre quiere hacer leña del árbol caído, y en este caso, el hacha la coge el señor Carlos Medina. Se aprovechó del desencanto de la afición para, a través de su revista, iniciar una cruzada contra el señor Muñoz con el fin de que vendiera el club. Tomó las riendas de los desencantados, se inventó nombres de futuros compradores y sacó todos los trapos sucios que podía conocer. Quizá, tendría muchos conocimientos de cuando viajaba con éste en su coche o en el de otros consejeros a ver los partidos del Cádiz y comía y bebía gratis total, en una especie de todo incluido. Pero la película no se desarrollaba como el señor Medina esperaba, y el señor Muñoz no vendía. Y se nombró un nuevo Consejo de Administración, un nuevo presidente, el señor Enrique Huguet, señor con mayúsculas, y se nombró un nuevo director deportivo, don Roberto Suárez, trabajador nato. Se ve que no le gusto esto, y a través de su revista empezó a ridiculizar con caricaturas y descalificaciones a estos señores y a todo el consejo. Marioneta era su palabra preferida.

La temporada acabó mal, y el señor Medina se frotaba las manos ante una nueva temporada de insultos. Pero en esta, Muñoz mueve ficha y trae a Quique Pina. Y este coloca a su padre como presidente. La ilusión por el equipo regresa. La situación del club en este año sigue siendo la misma, los actores no. ¿Será capaz el señor Medina de seguir con las caricaturas y las descalifacaciones con los recien llegados? No, creo que no. Su cara el otro día tras finalizar el trofeo lo decía todo, desencajada, más colorada que nunca. Ahora, a buscar nuevos enemigos. Esta partida que el mismo empezó contra Muñoz, la ha perdido, la terminó perdiendo por jaque mate.