Más de la mitad de las farmacias de Castilla-La Mancha secundan la huelga

Un total de 556 farmacias de las 1.274 que hay en Castilla-La Mancha han abierto hoy, incluidas las de la provincia de Albacete que no han secundado la jornada de paro convocada en toda la región con motivo de la deuda de 125 millones de euros que tiene el Gobierno de Castilla-La Mancha con el sector.

El viceconsejero de Sanidad de Castilla-La Mancha, Jesús Galván, ha explicado este mediodía, en rueda de prensa en Toledo, que las farmacias que han cerrado "no tienen autorización" de la Junta para hacerlo, por lo que se enfrentan a una falta grave que se puede sancionar con multas de entre 3.000 y 15.000 euros. "Estamos en la obligación de aplicar la legislación", ha contestado el consejero a preguntas sobre si la Junta sancionará a las farmacias que no han abierto sus puertas.

Según los datos que ha ofrecido Galván, permanecen abiertas 556 del total de 1.274 que hay en Castilla-La Mancha, entre ellas las de la provincia de Albacete -que no han secundado la medida- y otras 221 de guardia en Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo. El viceconsejero de Sanidad ha manifestado que no se ha producido ningún "problema de desabastecimiento" por este cierre y ha añadido que ya hay más de 200 farmacias de la región que se han acogido a las "soluciones financieras" que ha propuesto la Junta, aunque no ha desvelado cuáles son.

Galván ha dicho que el calendario de pagos que reclaman los farmacéuticos es "una de las muchas soluciones que se pueden adoptar y que no son ni siguiera imprescindibles para que se obtenga la liquidez adecuada". "La prueba es que hay más de 200 que ya han encontrado una solución, a un interés muy favorable, que no se le da a ningún otro sector económico", ha destacado Galván, quien ha añadido: "eso es porque el sector es sólido, porque el cliente es buen pagador y que una crisis se pasa y eso lo sabe cualquier que sabe hacer negocios".

"La voluntad que tenemos es ir adelantando pagos lo antes posible", ha señalado el viceconsejero, quien ha avanzando: "tan pronto como obtengamos globalmente la liquidez resolveremos el problema al menor coste financiero posible".

El cierre

Por su parte, los farmacéuticos han advertido reiteradamente de que se encuentran en una situación límite, que están al borde de la quiebra y siguen reclamando a la Junta que establezca un calendario de pagos de los 125 millones de euros que adeuda de las mensualidades íntegras de los meses de junio y julio, y la mitad de mayo.

El director general de Calidad, Planificación, Ordenación e Inspección de la Consejería de Sanidad, Javier Hernández Pascual, ha advertido de que el cierre no está autorizado, "incumple la reglamentación" y puede ser considerado como "una falta grave". Asimismo, ha recordado que "el reglamento farmacéutico atribuye a la interrupción unilateral del servicio farmacéutico por parte de la oficina de farmacia la consideración de infracción grave".

Según Hernández Pascual, la legislación sanitaria aplicable a las oficinas de farmacia "preserva el derecho a la asistencia farmacéutica continuada y no contempla el cierre del establecimiento por motivos económicos".