El Ibex-35 no logra salvarse de una nueva jornada de pérdidas
La apertura al alza de Wall Street evita una repetición del desplome generalizado en los parqués europeos
MADRID. Actualizado: GuardarNo pudo ser. Una sesión frenética, en la que los índices europeos se movieron con los vertiginosos desplazamientos propios de una montaña rusa, concluyó con nuevas, aunque moderadas pérdidas, en las Bolsas españolas, gracias a que la apertura alcista de Wall Street, a la espera de un mensaje positivo de la Reserva Federal, templó los ánimos. Pero el Ibex 35 cedió ayer un 0,36% adicional, y ya se encuentra en 8.428,9 puntos. Es el mismo nivel que presentaba en la primavera de 2009, en la fase más aguda de esta crisis de nunca acabar, que justamente tuvo su arranque hace cuatro años. ¿Alguien se acuerda?. En aquella ya lejana sesión del 9 de agosto de 2007, el Ibex-35 retrocedió un 1,11%... hasta quedar en 14.838,30 puntos.
En la jornada de ayer, no apta para cardíacos, el principal índice español se apuntó en los primeros compases una notable alza del 2,6%, para venirse abajo a media mañana y registrar descensos del 4,3%. La apertura en positivo al otro lado del Atlántico no logró impedir los números rojos en Europa. Tampoco evitaron esa penalización final las nuevas compras de bonos realizadas por parte del Banco Central Europeo, que sirvieron, eso sí, para mantener la prima de riesgo de España en niveles de 272 puntos básicos, y la rentabilidad de las obligaciones a diez años en el 5,056%. Para Italia, estos valores se colocaban en 281 puntos y el 5,162%, respectivamente.
La intervención del BCE la confirmó su presidente, Jean Claude Trichet, que en declaraciones a distintas emisoras francesas, reconoció que la entidad estaba procediendo a la compra de títulos en los mercados secundarios de España e Italia. Añadió que pensaba seguir con esa práctica -pese a admitir que se trata de una medida «no convencional»-, cuando la considere necesaria para «intentar restablecer el equilibrio de los mercados». El dirigente aprovechó la ocasión para recordar a los estados de la zona euro la responsabilidad que tienen de cumplir los 'deberes' pendientes: España e Italia han de «acelerar las medidas para el retorno a una situación presupuestaria normal» y todos los países europeos deben tomar cuanto antes las disposiciones necesarias para cumplir los acuerdos de la 'cumbre' del pasado 21 de julio, declaró.
Inquietud alemana
Después de una jornada marcada por una fuerte volatilidad, mejor suerte que Madrid corrió la Bolsa de Milán, que siguió una trayectoria paralela, pero pudo cerrar con una subida del 0,52%. Las Bolsas de Londres y París registraron fuertes rebotes y lograron terminar la sesión con subidas del 1,89% y el 1,63%. El índice de referencia de la Bolsa francesa puso fin a once sesiones consecutivas de pérdidas, que lograron destrozar los nervios de los más avezados ahorradores. En las primeras horas de la jornada, el Footsie londinense llegó a sufrir un desplome del 5%, del que consiguió recuperarse. Más inquietantes fueron las oscilaciones del Dax de Francfort, que tras registrar pérdidas históricas de hasta un 7%, concluyó con un leve retroceso del 0,10%.
¿Qué le ocurre a la Bolsa alemana?. Los expertos creen que está pagando la factura del coste de los rescates a países periféricos europeos en dificultades pero, sobre todo, que los inversores temen las dramáticas consecuencias que un nuevo episodio de ralentización económica mundial puede tener para una economía como la germana, volcada en las exportaciones.
Al Banco Central Europeo le preocupa, por otra parte, que las entidades financieras de la zona euro empiecen a manifestar signos de desconfianza similares a los producidos tras la quiebra de Lehman Brothers. El austriaco Ewald Nowotny, miembro del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), manifestó su inquietud por la propensión de los bancos a depositar dinero en la institución de Fráncfort.
La situación no es «por el momento» tan grave como en 2008 pero hay «algunos paralelismos», explicó Nowotny. Los depósitos de bancos en el BCE han «aumentado de forma masiva. Es una mala señal», agregó. El viernes, estos depósitos se elevaron a 134.830 millones de euros, según cifras publicadas en la página web del BCE, la mayor cantidad desde febrero y una cifra muy superior a la de principios de agosto.