La huelga de autobuses y el corte de Esteve dejan el centro semidesierto

La plantilla de Urbanos Amarillos, empresa concesionaria del transporte urbano de Jerez, ha iniciado a las 00.00 horas de hoy lunes una huelga de carácter indefinido por el impago de las dos últimas nóminas. Según han explicadofuentes del comité de empresa, la dirección de Urbanos Amarillos se niega a abonar las nóminas asegurando que el Ayuntamiento le adeuda una cantidad indeterminada de dinero. Sin embargo tanto el comité como el propio Consistorio -a través de un comunicado de prensa- sostienen que Urbanos Amarillos no tiene obligación de percibir cantidad alguna hasta el próximo mes de mayo, que es cuando vence el primer año de la firma de la concesión.

A la huelga de autobuses se une el corte de tráfico de la plaza Esteve con motivo de las obras de acondicionamiento del pavimento de la céntrica calle Santa María. Entre ambas cosas, los comerciantes de la plaza Esteve están siendo los principales perjudicados. Desde el Consistorio informan de que el inicio de la obra se ha hecho coincidir con la temporada estival, fecha en la que se reduce considerablemente la densidad de tráfico en la zona afectada.

La actuación conlleva necesariamente modificaciones en el tráfico de los alrededores de Esteve, como el cambio de sentido de circulación de la calle Corredera hacia Las Angustias. Asimismo, en esta vía se procederá a la eliminación del aparcamiento existente en el margen izquierdo según el sentido de circulación con el fin de facilitar hacerlo en ambos sentidos y dar entrada a los aparcamientos subterráneos del Arenal y Esteve.

Entre una cosa y otra, tanto la plaza de Abastos como los alrededores de la plaza Esteve se encontraban ayer bastante afectados, mientras los comerciantes de la plaza mostraban su indignación.

Respecto a los autobuses, el Gobierno local ha recordado que el contrato que regula la concesión del servicio no establece un fraccionamiento mensual del canon que debe abonar el Ayuntamiento, tal y como ahora pretende la empresa. Además, la anterior concesionaria -Cojetusa- dejó varias nóminas pendientes de abono antes de su marcha, lo que agrava aún más la situación de los trabajadores.

El Ayuntamiento ha demandado a Urbanos Amarillos que abone a Cojetusa los 3 millones de euros en que se valoró la flota de autobuses, para que de este modo se pueda hacer frente a las obligaciones contraídas con los trabajadores.

Los servicios mínimos que regirán en esta convocatoria de huelga, que tiene carácter indefinido, contemplan el funcionamiento de un autobús por línea.