El Estado recorta su déficit un 19% en el primer semestre del año
La mejora en la recaudación por IRPF e IVA y la reducción de las inversiones por los ministerios de Fomento y Defensa fueron clave
MADRID. Actualizado: GuardarUn día después de que el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) verificase las dificultades que atraviesan las comunidades autónomas para cumplir sus obligaciones presupuestarias, la administración central exhibió músculo y presumió de un recorte interanual del déficit del 18,9% en la primera mitad del año. Los números rojos del Estado sumaron 24.132 millones de euros hasta junio, cantidad equivalente al 2,21% del Producto Interior Bruto (PIB).
El Gobierno quiso recalcar que el proceso de consolidación fiscal, que debe conducir al reequilibrio de las cuentas públicas, está bien orientado. Y que el objetivo de recortar este año el déficit estatal hasta el 4,8% del PIB, desde el 5,7% del PIB que registró en 2010, es factible con la actual política presupuestaria. Toda una declaración de principios en un momento en que algunos ejecutivos autonómicos como el de Murcia dudan de su capacidad para prestar servicios básicos como la sanidad y amagan con devolver las competencias.
Los datos avanzados por el secretario de Estado de Hacienda, Juan Manuel López Carbajo, muestran que el saldo negativo sumado por las cuentas estatales hasta junio es inferior en 5.637 millones de euros al del mismo período de 2010. En términos de contabilidad nacional, ese déficit resulta de unos ingresos no financieros de 49.046 millones de euros, frente a unos gastos que alcanzaron los 73.558 millones. En términos de caja, una metodología contable que anota los ingresos y los pagos realizados en el momento en que se hacen efectivos, el desequilibrio del Estado asciende a 23.495 millones, montante sustancialmente inferior al saldo negativo de 30.794 millones registrado el año pasado por estas mismas fechas.
Ralentización
López Carbajo explicó que los datos reflejan «la estabilización de la economía» y los efectos sobre las cuentas públicas de «las medidas de consolidación fiscal», eufemismo para referirse a las subidas de impuestos y los recortes sociales, salariales y de inversiones aprobados en 2010. El proceso de reequilibrio «está perfectamente encauzado» y «el margen que tenemos por el lado de los ingresos nos llevará a cumplir de sobra el objetivo de déficit», recalcó.
El dato de junio puede hacer pensar en una ralentización en la corrección del déficit. El recorte de casi el 19% es mucho menor que los registrados a principios de año -en el entorno del 50%- y en mayo (25%). Pero esa bajada, a medida que avanza el ejercicio, en el porcentaje de números rojos compensados es normal. El grado de ejecución del presupuesto a comienzos de año es mínimo y a medida que pasan los meses cobra impulso la consumación de los programas previstos, y con ello los pagos.
Los ingresos públicos totales, incluida la parte correspondiente a las administraciones territoriales, sumaron en el primer semestre 82.595 millones, con un incremento interanual del 4,2%. Los impositivos, el 92% del total, alcanzaron los 75.718 millones, lo que supone también un aumento del 4,2%.
El IRPF acumuló una recaudación de 32.297 millones, un 6,5% más interanual, por las menores devoluciones y el crecimiento de las retenciones del trabajo en el sector privado. La otra cara fue el impuesto de sociedades, que grava el beneficio de las empresas, que ingresó hasta junio 4.006 millones, un 15,6% menos.
Impuestos especiales
El IVA generó en el primer semestre 26.774 millones, un 9,4% más interanual. López Carbajo cifró en 2.900 millones la recaudación extra por la subida de los tipos de este tributo hace más de un año. Los impuestos especiales recaudaron 9.400 millones, un 4% menos, por los retrocesos en los tributos que gravan el tabaco (cayó un 3,6%) y los hidrocarburos (5,1%).
Los gastos sumaron hasta junio 69.183 millones, un 19,7% menos interanual. El descenso está influido por la disminución de las transferencias a las autonomías por el nuevo modelo de financiación (esa partida bajó de 20.185 millones a 6.684 millones) y de las inversiones reales, que sufrieron un recorte del 26,8%. Destaca el frenazo inversor de los ministerios de Fomento -que destinó a inversión 1.848 millones, 697 millones menos- y de Defensa, con 577 millones, 139 millones menos que el año pasado.