Canales busca minutos fuera del Madrid

La perla cántabra, Sergio Canales, busca un puesto fuera del Real Madrid para disfrutar de la continuidad que Mourinho le negó durante su única campaña el equipo blanco. El técnico portugués le ha comunicado que será uno de los descartes para la próxima temporada y que debe resolver su situación. El club le ha ofrecido en el mercado para cederle durante una temporada o venderle si cierra un negocio lucrativo que rentabilice los seis millones invertidos en su fichaje. Por el momento, los más interesados en su contratación son el Valencia y el Villarreal, dos equipos punteros que participan en la Liga de Campeones y que le ofrecen el ambiente competitivo que desea el santanderino.

El Valencia manejaba en un segundo plano la operación por el cántabro ya que su prioridad es un central pero el reciente interés del Villarreal ha acelerado las negociaciones. El equipo amarillo se ha inmiscuido porque busca un sustituto de Cazorla y cuenta con el dinero del reciente traspaso para suplir al asturiano. El club de Castellón se encuentra en un período de reconstrucción y la posible marcha de su estrella, Giuseppe Rossi, ha puesto a trabajar en el mercado al club de Fernando Roig. No obstante, la entidad de Manuel Llorente va en cabeza en esta disputa con su vecino. De hecho, el responsable de la secretaría técnica del Valencia, Braulio Vázquez, le ha fijado como una prioridad en su cartera de fichajes y negocia con el Madrid el traspaso total, aunque en este caso los blancos insisten en una opción de recompra.

Por el momento el futbolista únicamente ha manifestado sus preferencias por un club español una vez que termine su participación en el mundial sub'20 que se está celebra durante las presentes fechas en Nicaragua.

Un año blanco

Canales llegó de la mano de Florentino Pérez y Jorge Valdano a la capital de España, antes de la contratación de Mourinho, pero el técnico aceptó la incorporación con el deseo de que se adaptara de manera progresiva. Kaká y Özil le cerraron las puertas en el medio del campo de inicio, aunque la lesión del brasileño le abría la posibilidad de un hueco en el equipo. Sin embargo, el partido de Copa del Rey de noviembre ante el Murcia precipitó las críticas públicas del técnico. «No me ha gustado Canales. Sabía quién no iba a jugar un gran partido. Trabajo a diario con ellos y sabía que los no trabajan muy bien no están en condiciones de jugar bien. Estoy contento con lo que ha sucedido porque puedo decir a la cara a cada jugador que juega como trabaja», sentenció el portugués. Desde entonces, la marginación de Canales se hizo patente y apenas sumó 300 minutos en 10 partidos de Primera División. Escasa participación para una de las promesas del fútbol español, quien ahora tratará de cambiar su situación en un nuevo equipo.