Molinos de Navantia

El reciente convenio entre Navantia y Acciona para la investigación y el desarrollo de la energía eólica marina puede ser el empujón de salida para que se implanten parques eólicos marinos en nuestra provincia y se acaben las resistencias y trabas burocráticas. La tecnología de los aerogeneradores off-shore es mucho más compleja que la terrestre. Su estudio y aplicación generarán importantes avances científicos y tecnológicos y la creación de una mano de obra abundante y especializada, tan necesaria en estos momentos de crisis. Además, al ser una industria pionera, es muy exportable y puede originar una copiosa carga de trabajo que dé estabilidad a la empresa pública durante muchos años. Cualquier retraso añadido a estos proyectos es desaprovechar oportunidades que difícilmente volverán a pasar. España, actualmente, es líder de generación eólica terrestre, la cuarta a nivel mundial, pero en la marina vamos con un cierto retraso respecto a otros países avanzados. Todavía hay tiempo para engancharse a esas naciones y superarlas. Si siguiéramos sin apostar por esta nueva modalidad de aprovechamiento eléctrico en el mar, uno de los pocos sectores punteros de nuestra economía dejaría de serlo y nuestra crisis se agudizaría. En este afán se necesitarán bastantes investigadores, por lo que sería muy provechoso, para obtener sinergias, ofrecer a la Universidad de Cádiz su incorporación al convenio. La Universidad ya mostró en su día mucho interés en el frustrado parque eólico Cruces del Mar y puede aportar sus valiosos conocimientos en las distintas disciplinas científicas implicadas.

La complejidad técnica y el esfuerzo financiero son titánicos. Se necesitan de media unos 6 millones de euros por cada megavatio construido. Las bases de los molinos serán diversas, unas podrán ser fijas y otras necesariamente flotantes. Habrá que situar obligatoriamente estaciones meteorológicas en cada parque para el buen funcionamiento de los aerogeneradores. Se construirán barcos específicos para la colocación de estas estructuras y para su mantenimiento, así como redes eléctricas y subestaciones. Acciona pretende instalar 1.000 megavatios, es decir invertir unos 6.000 millones de euros en el proyecto Mar de Trafalgar, frente al Cabo de Trafalgar. ¿Estamos dispuestos a facilitar esa inversión para que el tejido industrial de la provincia y el empleo mejoren? ¿Seguirá oponiéndose la Diputación tras el cambio de signo político?