El autor del triple crimen denunció a un familiar de las víctimas de la agresión

La pequeña localidad de Palomares, famosa por las bombas nucleares de Estados Unidos, vivió ayer conmocionada por la muerte a tiros de tres de sus vecinos, un matrimonio y su hijo, ocurrida en la noche del martes. El autor confeso de los hechos, J.A.Z.G., de 40 años, se encontraba al cierre de esta edición bajo custodia de la Guardia Civil. Mientras, los familiares velaban a las víctimas, que hoy serán enterradas. El Ayuntamiento de Cuevas de Almanzora, al que pertenece la pedanía de Palomares, decretó luto por el suceso. Poco ha trascendido de los motivos del presunto asesino para matar a sus vecinos. Fuentes de la Guardia Civil confirmaron que varios días antes el detenido había denunciado a un familiar de las víctimas por agresión.

J.A.Z.G fue atendido en el complejo hospitalario de Torrecárdenas después de que se entregara a la Guardia Civil la noche del martes tras disparar contra J.S.T. y F.C.S.F., de 46 y 42 años, y su hijo de 25, C.S.S.. Así lo confirmaron a Europa Press fuentes sanitarias, que precisaron que fue curado de las contusiones que presentaba como consecuencia del forcejeo y la reyerta previa al tiroteo mortal que se desencadenó a las 21.00 en el paraje Cabezo Martino de la pedanía, de apenas 1.700 residentes habituales.

Denuncia previa

J.A.Z.G. había interpuesto el día 21 ante el puesto de la Guardia Civil una denuncia por una supuesta agresión contra un familiar de sus tres víctimas, de etnia gitana y a quienes disparó con una escopeta. Consta, asimismo, la presentación de otra denuncia, en este caso anterior al corresponder a 2008, debido a la sustracción de maquinaria y herramientas de construcción, aunque los investigadores no pueden relacionarla con el desencadenante del homicidio ya que, en esa ocasión, no se llegó a identificar a los autores del robo.

Durante todo el día de ayer se mantuvo un dispositivo de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la zona, que ha transcurrido sin incidentes. El subdelegado del Gobierno en Almería, Andrés Herás, señaló que el citado el dispositivo activado es el «necesario y oportuno» ante la situación.

El Ayuntamiento de Cuevas del Almanzora decretó dos días de luto en solidaridad con las víctimas y sus familiares, así como de muestra de «repulsa a todo acto de violencia sin justificación». Al tiempo, hizo un llamamiento para que se garanticen en la pedanía «muestras de madurez, civismo, cordura y racionalidad», como siempre ha demostrado el pueblo de Cuevas del Almanzora.