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La Junta aprueba un campo de golf en Barbate con hoteles y 450 viviendas

El Següesal Golf Resort recibe el primer sello de Interés Turístico de Andalucía, que permite la construcción de alojamientos

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Ha tardado casi tres años en recibir el visto bueno de la Junta pero finalmente el proyecto del campo de golf 'El Següesal Golf Resort', en el municipio de Barbate, ha sido el primero en recibir el sello de Interés Turístico de la comunidad autónoma. Según el Consejo de Gobierno que le otorgó ayer este marchamo de calidad consideró que esta iniciativa cumple con los requisitos urbanísticos, características técnico-deportivas y exigencias de sostenibilidad que fija el decreto autonómico sobre la implantación de este tipo de equipamientos, que se publicó en 2008. Esta noticia ha sido muy esperada, especialmente por el Ayuntamiento de Barbate, que busca nuevos ingresos con los que paliar la ruina de sus cuentas.

El proyecto, promovido por la empresa Bogaris Residential 7, SL, recoge en una primera fase la construcción de un campo de golf de 18 hoyos, dos establecimientos hoteleros de cuatro estrellas (uno con 150 habitaciones y otro con 200), 450 viviendas, 956 apartamentos turísticos. Además, contempla la oferta complementaria de instalaciones deportivas, un complejo hípico, un centro de salud y belleza y equipamientos comerciales, administrativos y docentes. Todo este conjunto generará, según la promotora, 516 empleos cuando se encuentre en plena explotación.

La declaración de Interés Turístico abarca una superficie de 312 hectáreas en el paraje de El Següesal, ampliable hasta un máximo de 467. Así, el promotor podrá solicitar este incremento una vez que haya consolidado el 70% del proyecto y cuando la construcción de los equipamientos de los usos complementarios suponga como mínimo el 50% de la edificabilidad prevista y la de los usos residenciales no supere el 35%.

En relación con los requerimientos de carácter medioambiental, el riego del campo y de sus zonas verdes se llevará a cabo con aguas procedentes de la depuradora de Vejer, así como con recursos almacenados en lagos y pozos propios. Además de las exigencias de la normativa autonómica de campos de golf, el proyecto se somete también a las condiciones fijadas en la autorización ambiental unificada que la Consejería de Medio Ambiente otorgó el pasado mes de junio.

El Ayuntamiento de Barbate dispondrá de un plazo máximo de dos años para modificar su instrumento de planeamiento urbanístico y adaptarlo a las condiciones de la declaración de Interés Turístico. A partir de esta modificación, el promotor dispondrá de cuatro años para la ejecución e implantación del campo de golf.

El proyecto de El Següesal (más conocido en la zona como La Porquera) se incluye en las zonas prioritarias previstas por el Plan General de Turismo Sostenible para el segmento del golf. El entorno del futuro complejo ofrece un valor turístico de alta calidad por su patrimonio cultural y natural, con la presencia de parques naturales como los de La Breña y Marismas de Barbate, los Alcornocales y el Estrecho. Y esta ventaja que contempla la Junta para otorgarle el Interés Turístico es la misma debilidad que subrayaron desde Ecologistas en Acción. Desde la agrupación conservacionista entendían que este proyecto es otro desarrollo urbanístico más que se hace «demasiado cerca de los parque naturales, cuando no dentro de ellos».

Además de este campo de golf, hay previsto otro en Barbate, el de El Bujar, promovido por Novaterra. Pero este proyecto se encuentra un poco más atrasado en la tramitación y cuenta con el inconveniente de tocar terrenos de Hazas de Suerte, lo que complica más los trámites.