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La huelga de autobuses seguirá adelante aunque los trabajadores cobren la nómina
La plantilla exige el cumplimiento del cien por cien del convenio como media indispensable para frenar la protesta
Actualizado: Guardar«Como no cumplan con todos y cada uno de los acuerdos, la huelga durará muchísimo». Con esta rotunda frase se ha expresado esta mañana el presidente del comité de empresa de Urbanos Amarillos, José María Romero, durante una rueda de prensa en la que, con el apoyo de Comisiones Obreras, ratificó que el paro indefinido previsto para el próximo 8 de agosto seguirá adelante. Las razones, como aclaró, no son solo económicas aunque evidentemente los atrasos sufridos en el cobro pesan más que ningún otro: «Éste es el incumplimiento principal; llevan nueve meses en la ciudad y llevamos nosotros 26 días de huelga porque nos pagan cuando quieren. Pero ya aunque lo hagan no la desconvocaremos mientras no cumplan con el cien por cien de lo pactado: salario, jornadas de trabajo, uniformes, todo».
Según Romero, el problema fundamental radica en que Urbanos Amarillos no cumple solo con los trabajadores sino también con otra de sus obligaciones como el pago del canon de la concesión, cifrado en 1,3 millones de euros, o el de uso de los vehículos de la empresa anterior, Cojetusa, de 1,9 millones. La consecuencia de ello es que los administradores concursales de esta última empresa tampoco pueden afrontar los atrasos que mantienen con la plantilla, y que abarcan entre los 5.000 y los 7.000 euros por empleado. «No cobramos ni de un lado ni de otro», se lamentó el presidente del comité, recordando que la concesionaria actual les debe la nómina de junio, la extraordinara, anticipos de julio y vacaciones a algunos compañeros. «Si llega el día 8 y nos faltan cordones en los zapatos, seguiremos con la protesta», sentenció.
Juan González, secretario del comité, matizó que no se encuentra en el ánimo de los trabajadores el pedir la municipalización del servicio, como así lo aseguró la pasada semana la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo. «Nosotros lo único que queremos es una empresa solvente –puntualizó–, que cumpla con el convenio colectivo y se haga cargo de salarios, la red de transportes, frecuencias, paradas, renovación de la flota y de todo lo que no se ha hecho hasta ahora». El secretario local de CC OO, José Manuel Trillo, por su parte, hizo un llamamiento al Ayuntamiento para que ejerza su labor de «mediador» y «no eche más leña al fuego y maree la perdiz, como el gobierno anterior». En la misma línea se dirigió a los comerciantes, a los que pidió que «no se posicionen con la empresa» y se sienten a dialogar con ellos antes de realizar juicios de valor sobre la huelga.
Trillo también anunció que la plantilla del servicio de autobuses de la zona rural, Linesur, tampoco cobra, por lo que organizará una huelga para mediados del mes de agosto.