Los jornaleros ganarán poco más de 1.000 euros al mes por su trabajo

La emigración de jornaleros del campo no se ha dejado de lado en la comarca y, de hecho, la mayoría de los 500 alcalareños, los 140 olvereños y los 70 policheros que van a desplazarse a Francia lo hacen para trabajar en campañas como la de la vendimia. No obstante, en la construcción se busca una ventaja fundamental, el hecho de la no estacionalidad del trabajo, algo que no puede ofrecer el campo.

Los empleados de la agricultura buscan ganar allí unos nueve euros a la hora, aunque tienen que descontarles gastos como el segur. Los que buscan tajo en la construcción recibirán una cantidad similar pero sin descuentos. Los primeros pueden ganar entre 1.100 y 1.300 euros y los albañiles entre 1.200 y 1.500, aunque estos últimos tienen que pagar alojamientos compartidos. Las temporadas de la vendimia francesa y la manzana belga se terminarán a principio de noviembre y todos estarán de vuelta para la festividad de 'Todos los santos'.

Los emigrantes buscan, además del dinero inmediato, prolongar así las ayudas sociales que pueden recibir, como el desempleo, que a muchos se les ha agotado. Además, también podrán disfrutar de algunas prestaciones, sobre todo por tener hijos, que les ofrece el país que los acoge.

En sus pueblos, sus familias esperan como agua de mayo el envío del dinero que ganen durante el periodo que estén fuera.