La Junta penaliza al Consistorio por utilizar las partidas de Acasa para otros fines
El Ayuntamiento solo recibirá una tercera parte de la asignación después de que el PSOE le diera otro uso a los fondos
JEREZ.Actualizado:Los problemas siguen persiguiendo a las trabajadoras de Acasa. Cuando parecía que lo más difícil ya estaba hecho -que el Ayuntamiento sacara el dinero de debajo de las piedras con la ayuda de Diputación para pagar a la empresa- ahora resulta que es la Junta de Andalucía la que les pone otra losa sobre sus cabezas. Según anunció ayer la alcaldesa de la ciudad, María José García-Pelayo, la Junta de Andalucía ha penalizado al Consistorio jerezano retirando de la próxima transferencia los 700.000 euros que el anterior gobierno municipal utilizó para otros fines en vez de para pagar a Acasa.
Así, las arcas municipales solo recibirán a finales de este mes o principios de agosto alrededor de 400.000 euros en vez de los 1,1 millones que cuesta el servicio de ayuda a domicilio y que se ingresan cada dos meses. «Hubo un desfase de tesorería y vamos a tener que seguir buscando el dinero. Van a cobrar pero mientras no pongamos orden vamos a tener que hacer magia para afrontar los pagos», aseguró la primera edil. De esta forma, si la situación era complicada antes, el castigo de la Junta no hace otra cosa que poner más nubarrones en el horizonte de este colectivo compuesto mayoritariamente por mujeres. La alcaldesa destacó que «se ha hecho un esfuerzo inaudito para afrontar este pago, pero desde luego merecido por parte de los trabajadores, ya que tienen derecho a cobrar».
Por su parte, la presidenta del comité de empresa de Acasa, Encarna Barrios, apuntó con evidente enfado que «el gobierno anterior debe poner encima de la mesa los 700.000 euros, que bastante han comido ellos ya del servicio de ayuda a domicilio».
La mala noticia vino acompañada por la certificación de que García-Pelayo ya había firmado la orden de transferencia de 118.000 euros que se suman a los 500.000 con los que se podría pagar la extra y la nómina de junio. No obstante, las trabajadoras seguían anoche a las puertas del Ayuntamiento aguardando la esperada llamada de los directivos de la empresa. «En cuanto nos digan que han recibido el dinero, levantamos la acampada. Es lo único que nos vale», dijo Barrios al cierre de esta edición. Así las cosas, las empleadas se dispusieron a pasar la cuarta noche al raso en defensa de sus salarios.
Recogida de alimentos
Mientras no termina de llegar la solución en forma de ingreso bancario, los sindicatos siguen adelante con la campaña de recogida de alimentos para las trabajadoras que más lo necesitan. Tanto particulares como empresas han acudido a la llamada de solidaridad y han aportado tanto productos perecederos como no perecederos.
Después de que las trabajadoras de Limasa fueran las primeras el jueves en ayudar a sus compañeras de fatigas, numerosos empleados del Ayuntamiento aportaron ayer arroz, garbanzos y hasta lechugas, patatas y tomates, respondiendo a la petición de que también se aportaran alimentos frescos. «Una señora ha ido por carne a la Plaza y nos la ha traído. Se ha repartido enseguida para que no se estropee», dijo Barrios. También han recibido donaciones de UGT y de empresas como Papacor y La Arcadia mientras que Puleva hará un importante envío el lunes.
Los sindicatos seguirán con la campaña hasta que las trabajadoras cobren sus salarios.