El Salón Inmobiliario de Conil marca la senda de recuperación del sector

Partiendo de que la situación es difícil, y que la crisis ahoga por falta de financiación, exceso de stock de inmuebles, y falta de confianza de los compradores, los expertos reunidos ayer en las jornadas técnicas del Sicol, el Salón Inmobiliario de la Costa de la Luz que se celebra hasta el domingo en Conil, comienzan a ver indicios de recuperación del sector.

La construcción y la compra-venta de pisos vivió su boom a raíz de una serie de condicionantes legales y económicos a mediados de los noventa. Unos años después los picos estadísticos situaron en 2007 el ritmo constructivo de España por encima del de Alemanía, Francia e Italia conjuntamente.

El resultado de ese incremento desaforado de la demanda de inmuebles y los precios de éstos es evidente; más de 700.000 pisos vacíos en España, algo más de 17.000 en estos momentos en la provincia de Cádiz.

Pero como de datos estadísticos no vive el hombre, los expertos comienzan ya a hablar del principio del fin de esta particular «travesía del desierto» que su supuso la caída del ladrillo a nivel nacional.

Con matices, «Cádiz todavía es una provincia con posibilidades de crecimiento». Y es que el litoral y la segunda residencia tira del carro. La recuperación de la economía alemana o francesa está haciendo que algunos promotores hayan vuelto a vender residencias turísticas. Pero eso no es suficiente.

Como apuntaban ayer Javier Fernández, gerente del Colegio de Economistas de Cádiz, Manuel Gandarias, director del gabinete de estudios de pisos.com, y Emilio Corbacho, secretario general de Fadeco y Faec en sus ponencias en el Sicol, «volver al nivel de negocio de los años del boom inmobiliario será imposible», pero en los próximos años el mercado podría repuntar y situarse en una situación media.

Fundamental para ello es que se estabilicen los precios, que se recupere la confianza y deje de subir el precio del petróleo y del euríbor, y que la seguridad laboral (empleo) de las familias mejore.

Además, la eliminación del enorme stock de inmuebles que tienen los bancos es otra de las condiciones previas indispensables. Basta un dato. En lo que va de año en la provincia de Cádiz se han producido 1.694 ejecuciones de hipoteca o embargos, es decir, cada día seis familias de esta provincia perdieron su vivienda.

Con este horizonte solo queda apelar a que la banca vuelva a abrir el grifo de la financiación y, aunque no en la medida que hace unos años, los préstamos y créditos vuelvan a llegar a las familias y se reactive el negocio.

Entretanto, la rehabilitación y las reformas están copando parte de ese mercado que quedó huérfano en Andalucía. Constructores y promotores tienen claro que en estos momentos hay que ofrecer «productos de calidad y a precios competitivos» para seguir vendiendo.

Algunos de los expositores del Salón Inmobiliario de Conil tienen ofertas suculentas en promociones, y la empresa municipal de vivienda de Conil, Rosam, también compite con promociones de VPO.