Las 'Nadeshiko' personifican el espíritu japonés
La japonesas, a punto de no participar en el Mundial por el desastre del tsunami, ven recompensado su trabajo tras años de esfuerzo
MADRID Actualizado: GuardarEl esfuerzo siempre tiene una recompensa y la superación da sus frutos cuando se trabaja para ello. Así lo ha demostrado la selección de fútbol femenino de Japón tras coronarse el pasado fin de semana en campeona del mundo. Las 'Nadeshiko', nombre de una flor rosada que se utiliza como uno de los arquetipos japonés de la perfección y la belleza, y que sirve para plasmar el 'ideal de mujer japonesa', asombraron al mundo tras imponerse a combinados en teoría superiores como EEUU, en la final, o Suecia, en las semifinales del torneo.
La conexión con el pueblo japonés fue brutal. Al día siguiente de derrotar a las norteamericanas en el último encuentro del campeonato, los diarios se agotaron en todos los kioskos de Tokio y el mismo domingo, tuvieron en vilo a millones de espectadores por la televisión. Además, el equipo ha personificado a la perfección los valores de perseverancia y coraje que el país abanderó tras el terremoto y el tsunami del pasado 11 de marzo.
Hasta levantar el trofeo en Alemania, pasaron muchos años y algunas victorias, como la lograda en los Juegos Asiáticos del pasado, pero también otras tantas decepciones. Tras casi treinta años, ven reconocido su trabajo y superación. En 1981, participaron en varios torneos regionales, siendo un combinado temporal hasta que ocho años después se creó la 'L-League', primera liga femenina japonesa, que obtuvo que clasificación para la Copa del Mundo de China en 1991. No lograron ni puntuar ni anotar un tanto pero asentaron unas bases para ir mejorando día a día.
El punto de inflexión
Poco a poco fueron subiendo escalones. Se clasificaron para cuartos de final en Suecia (1995) y participaron en los Juegos Olímpicos de Atlanta (1996). Todo un hito. El trampolín llegó cuando su actual técnico, Norio Sasaki, viejo conocedor del fútbol femenino, se hizo cargo del equipo. Él fue el gran artífice del éxito del combinado nipón. En su primer año en el cargo obtuvo la cuarta posición en los Juegos de Pekín (2008) y el Oro en los Juegos Asiático de China (2010).
El equipo, formado en su mayoría con jugadoras locales de la 'L-League', logró derrotar a las principales aspirantes al título y bicampeonas del mundo: Alemania, en cuartos de final, y Estados Unidos, en una final en la que nunca perdieron la esperanza tras ir dos veces por detrás en el marcador. Demostrando que nunca hay que darse por vencido. Sasaki cuenta con unas jugadoras jóvenes que unidas a la experiencia de otras tantas, dan esperanzas al país para seguir con los logros y la progresión. La actuación de la selección, ha servido para "animar y dar esperanzas a la gente" en un momento en el que el país sigue conmocionado por el desastre del pasado mes de marzo, tal y como reconoció el primer ministro japonés Naoto Kan. Las 'Nadeshiko' están demostrando que no son flor de un día.