Jorge Lorenzo se mantiene firme ante el poder de Honda

Los resultados de la primera jornada de entrenamientos del Gran Premio de Alemania dibujan un panorama esperanzador para Jorge Lorenzo. El campeón firmó el segundo mejor tiempo del día, a tan solo 95 milésimas de Marco Simoncelli, que fue el más rápido, y se libró del rosario de caídas que en los primeros minutos de la sesión matinal afectaron a sus principales rivales: Casey Stoner, Dani Pedrosa y Valentino Rossi cataron la dureza del asfalto alemán. Para Jorge, que viene de ganar la última carrera en Mugello, el buen arranque confirma las buenas sensaciones de Italia, y le da alas para tratar de presionar al líder, Casey Stoner, que no inició la cita alemana con buen pie.

En Sachsenring, las diferencias de tiempo son minúsculas: es la pista más corta de todo el campeonato, y lo que en otros circuitos se cuenta en décimas de segundo, aquí son milésimas. Los cinco primeros en la primera jornada de MotoGP aparecen separados en la clasificación por un margen de menos de medio segundo, un suspiro, pero suficiente para vislumbrar tendencias.

Simoncelli sigue siendo un cohete en los entrenamientos, pero aún debe confirmar su potencial en carrera, y detrás de él aparece un Jorge Lorenzo rápido y constante, preparado para plantar cara al ejército de Honda: la Yamaha del campeón es la única excepción entre las cinco primeras posiciones de parrilla, con los tres pilotos del equipo oficial Repsol HRC, Dani Pedrosa, Casey Stoner y Andrea Dovizioso, justo detrás del mallorquín.

«Aunque perdemos bastante en la recta porque se me levanta la moto, las sensaciones son parecidas a las de Mugello; creo que puedo ir muy rápido y poner presión a Stoner», valoró Lorenzo.