La tele busca litigantes en Jerez

«En tiempos de crisis siempre es una ayuda recibir un dinerito», esa es la premisa de la mayoría de los participantes que quieren intervenir como litigante en el programa de Telecinco 'De buena ley'. Se buscan personas que tengan entre 18 y 60 años y que sepan actuar, sin importar su físico. «Es un perfil tan amplio que te encuentras sujetos de todo tipo», comenta Alberto Puyol, coordinador de la escuela Teatro Estudio Jerez.

Aproximadamente unas 120 personas se dieron cita en la sede de Teatro Estudio Jerez durante el lunes y la mañana del martes. Todos exhibieron sus cualidades de interpretación ante el director de casting. El objetivo, ser elegidas y llevarse 300 euros. «Hay que buscar dinero donde sea, llevo dos meses en paro», dice Benito García, uno de los implicados en la prueba.

En el ambiente se respiraba una mezcla de ilusión y nerviosismo. Esta excitación ha jugado una mala pasada a más de uno «La verdad es que no estoy contento, no he estado muy fino», así se sentía Jorge, que era la primera vez que presentaba a un 'casting'. Otros se lo tomaban con más sentido del humor, «te pones un poco nerviosa, pero nosotras hemos venido a probar algo diferente y pasarlo bien», manifiestan Carmen y Nuria, entre risas, tras salir del ensayo. Los implicados representan dos papeles en un conflicto ficticio. Situaciones como la de dos compañeras de piso enfrentadas, debido a la falta de responsabilidad de una de ellas, o la disputa entre un matrimonio donde uno es fumador y el otro no soporta el tabaco han sido las protagonistas de las actuaciones. Ayudados de un texto ojeado minutos antes de la prueba, van con el deseo de demostrar, lo mejor que puedan, su capacidad de interpretación. Los seleccionados, de los que no hay un número concreto, pasan a una segunda ronda en la que tendrán más tiempo para prepararse un guión que personificarán más tarde.

Entre los que optan a ser elegidos había personas de todo tipo, desde jóvenes que estudian para ser actores y que ven aquí una buena oportunidad para coger experiencia de cara a su futuro profesional hasta cabeza de familias sin trabajo, que no atraviesan su mejor momento y que tienen una ocasión de ganar un dinero que ayude su menguada economía.

Pruebas para demostrar tus capacidades para las artes escénicas y una escuela de teatro. Esta es la combinación perfecta para que muchos de los aspirantes pertenezcan ya a la compañía y otros tengan la opción de pertenecer a ella en un futuro. «Que las pruebas se hagan en este lugar no es casualidad, es un reclamo con el fin de atraer a nuevo público a la academia», explica Alberto Puyol. «Es una ocasión perfecta para ganar algo de fama, alguien puede fijarse en ti», expone Claudia, alumna del centro. Los afortunados conocerán su suerte a finales de este mes. Eso esperan todos los participantes.