Salgado critica el trato a España en las pruebas de resistencia
La vicepresidenta no encuentra sentido a que no se considere capital las provisiones que han realizado bancos y cajas
MADRID. Actualizado: GuardarPor fin una voz oficial se ha sumado al coro de denuncias del sector financiero sobre el trato discriminatorio que bancos y cajas españoles han sufrido en esta nueva edición de las pruebas europeas de solvencia. «No tiene sentido» que la autoridad bancaria europea (EBA, por sus siglas en inglés), niegue la consideración de capital a las provisiones que las entidades han venido realizando en tiempos de bonanza con el fin de cubrir pérdidas cuando llegaran las vacas flacas, se quejó la vicepresidenta económica, Elena Salgado, en una entrevista publicada por el diario alemán 'Suddeutsche Zeitung'.
Las discrepancias van a ser la nota dominante de los resultados del examen, que la EBA autoriza a divulgar a última hora de la tarde de hoy, al cierre de los mercados. Del total de 91 entidades examinadas, 25 son españolas -la práctica totalidad de bancos, cajas y cooperativas- y el número de 'suspensos' puede alcanzar a una de cada cinco entidades presentadas. Han confirmado que no pasan el corte tanto el Banco Pastor como Catalunya Caixa, y la relación se completaría con Unnim y la alicantina CAM. No ocurre lo mismo con Caja Duero-Caja España, de la que se apuntó que no alcanzaría el 5% de capital en los términos establecidos por la autoridad europea. La entidad lo niega. «Estamos muy tranquilos, porque cumplimos los requerimientos en todos los escenarios», asegura.
Salgado recordó el mérito que supone sacar a la luz la situación de todas las instituciones financieras, cuando otros países siguen limitando el examen a las más brillantes. El sector recela de este empeño de transparencia, tras detectar que el modelo adoptado este año no solo establece parámetros más duros para la banca española -con estimación de pérdidas adicionales en 2011 en el escenario base, pese a la mejora económica reconocida- y penalizaciones por el riesgo inmobiliario, sino que resta valor a sus principales logros, como haber atesorado unas provisiones.