El 'diputado raso' Rubalcaba, en el centro de la diana
«No tienen tiempo de reciclar un candidato; hace falta un presidente», dice Sáenz de Santamaría
MADRID.Actualizado:Ya no se sienta en el banco azul, ni dispone de un micrófono para rebatir desde su escaño las críticas del PP pero Alfredo Pérez Rubalcaba siguió siendo ayer el principal protagonista de la sesión de control al Ejecutivo en el Parlamento. Tanto la portavoz popular, Soraya Sáenz de Santamaría, como el de ERC, Joan Ridao, le convirtieron en blanco de sus intervenciones. «Su predecesor en el cargo se ha ido del Gobierno pero se ha llevado la fórmula milagrosa para la creación de empleo», ironizó la diputada del PP al dirigirse a la vicepresidenta económica, Elena Salgado, que a partir de ahora será su 'rival' en el hemiciclo.
Hasta ahora, los duelos dialécticos entre Sáenz de Santamaría y Rubalcaba habían centrado en gran medida la atención de los medios un miércoles tras otro. El PP no ha cambiado de objetivo, pero ahora la disputa tendrá que ser por persona interpuesta.
Mientras el ex vicepresidente primero sonreía desde la segunda fila de la bancada socialista, Salgado se mofó del intento de la oposición de alcanzar con sus dardos a quien ya no tiene responsabilidades ejecutivas. «Tienen muchas ganas de discutir con el señor Rubalcaba; espero que también las tenga en campaña Mariano Rajoy», dijo. «No tienen ustedes tiempo para reciclar un candidato; España necesita un presidente y lo necesita ya», replicó en tono duro la dirigente del PP.
Ridao se movió en otras aguas. Recordó la promesa del candidato de instituir un impuesto a la banca para crear empleo, para reprochar a los socialistas que se «disfracen de izquierdosos» en los mítines, con el objeto de hacer en el Gobierno lo contrario de lo que prometen. Son los problemas, dijo, de la «bicefalia».