España, un país de cavidades
La expedición visita la cueva del Soplao en Cantabria
SANTANDERActualizado:La visita hoy de la Ruta Quetzal BBVA a la cueva del Soplao, en Cantabria, ha permitido a los ruteros conocer que España es hoy un referente a nivel mundial en el estudio y puesta en valor de cuevas. Actualmente, según los datos ofrecidos por el geólogo Juan José Durán Valsero, España cuenta con 70 cuevas de primer nivel que reciben una media de 5 millones de visitas al año, cifrándose en 100 millones el volumen de negocio que genera.
Cantabria, con más de 6.500 cavidades en su subsuelo, es una de las comunidades españolas que lideran este particular ranking de cuevas de primer nivel. De hecho, diez de las cuevas son Patrimonio de la Humanidad.
La Ruta Quetzal BBVA tuvo oportunidad de visitar hoy la cueva del Soplao. El recorrido por una parte de la cueva estuvo precedida de una serie de conferencias que situaron a los ruteros en el contexto. La cueva del Soplao, a 85 kilómetros de Santander en dirección Asturias, fue descubierta a principios del siglo XX cuando se explotaban las minas de La Florida. Abarca los municipios de Celis, Labarces y Rábago. El Soplao está considerada una de las grandes maravillas de la geología, atesorando un auténtico paraíso de espeleotemas (excéntricas, estalagmitas, coladas, columnas perlas de las cavernas, dientes de perro, etc…).
Además de su valor geológico, según explicó el director gerente del Soplao, Fermín Unzué, la cueva y su entorno albergan un excepcional patrimonio de arqueología industrial minera, con 20 kilómetros de galerías. La actividad minera también ha dejado huella en el espacio exterior con castilletes, hornos de calcinación, lavaderos y talleres. Las labores mineras se orientaron a la extracción de blenda y galerna, dos de las mejores menas para la obtención de zinc y plomo, respectivamente.
Desde que en julio de 2008 se hizo público el descubrimiento del Yacimiento Paleontológico de Rábago-El Soplao, se han realizado cuatro excavaciones que han proporcionado gran cantidad de datos. Previamente a su apertura hubo que restaurar 400 espeleotemas dañadas y hubo que suprimir un buen número de pintadas ya que saqueadores no tuvieron ninguna consideración con este tesoro desde los años que se cerró la mina en 1978 hasta que fue recuperada para Cantabria. La cueva está hoy monitorizada para evitar que la sufra de hongos y líquenes. Hoy en día no se superan las 250.000 visitas y ha supuesto una inyección económica para esta zona ganadera.
Todavía hoy las investigaciones avanzan a buen ritmo y se han publicado artículos en revistas científicas que tratan de la geología del yacimiento, de las afinidades botánicas y de la geoquímica del ámbar, además ya se han descrito nuevas especies de insectos fosilizados en ámbar.
Los expedicionarios no han dudado en calificar esta visita como otro de los grandes momentos de la Ruta 2011. Para muchos de ellos ha supuesto cerrar el círculo. Y es que la cueva del Soplao era uno de los temas en el que los jóvenes podían profundizar para optar a participar en esta aventura. Laura Sebastiá, de Valencia, lo dejaba claro nada más salir de la visita a la cueva. “Es un milagro de la naturaleza. No sé si había visto alguna vez algo tan impactante en directo”.
Cantabria recibe con lluvia a la Ruta
La Ruta Quetzal BBVA ha tenido la oportunidad de recorrer Santander y parte de Cantabria en el tercer día de navegación en el buque Castilla desde que los expedicionarios embarcaron en Pasajes (Gipuzkoa). Cantabria ha recibido a los ruteros con lluvia. No ha parado de llover en toda la jornada desde el momento en el que las autoridades locales han recibido a los expedicionarios liderados por el director Miguel de la Quadra-Salcedo en la misma cubierta del buque Castilla. La delegación ha estado encabezada por el consejero de Innovación, Industria, Comercio y Turismo de Cantabria, Eduardo Arasti, acompañado por el comandante del Castilla, Juan José Díaz del Rio; la concejala de Turismo del Ayuntamiento de Santander, Gema Igual, y el director de la zona de Cantabria de BBVA, José Luis Alciturri.
El consejero Arasti consideró un honor que la Ruta Quetzal BBVA haga parada en Santander y animó a los ruteros a ser “embajadores de Cantabria”. Y lo cierto es, que pese a la lluvia, los ruteros se han mostrado entusiasmados con lo visto en esta tierra. La expedición ha tenido oportunidad de recorrer en autobús las principales calles del centro de Santander y ser testigo del trasiego de universitarios que estos días pueblan las instalaciones de la Magdalena, donde se celebran los Cursos de Verano. Santander ha recibido a la Ruta con sus playas vacías de gente pero con un notable ambiente en sus calles. Porque la capital de Cantabria es en verano un destino vacacional como demuestra el hecho de que el turismo es ya uno de sus principales fuentes de ingreso.
Santander ha dado un vuelco desde que en 1941 un terrible incendio originado en una panadería arrasó con prácticamente todo el centro de la ciudad. Los destrozos fueron terribles. Desapareció el casco antiguo. Santander es hoy una ciudad reconstruida. Actualmente tiene 190.000 habitantes, del total de 560.000 que residen en Cantabria.
La Ruta Quetzal se traslada hoy a Picos de Europa, donde acampará antes de recorrer mañana miércoles sus principales parajes. La expedición se enfrentará a una larga marcha de cerca de 30 kilómetros. Los ruteros cruzan los dedos para que la lluvia les respete en el transcurso de la misma.