El príncipe Guillermo, un jugador de polo con mal perder

El príncipe Guillermo, duque de Cambridge, ha mostrado su lado más competitivo en la segunda jornada de la visita que realiza con su esposa, Catalina, a EE UU donde, antes de disputar un partido de polo benéfico, confesó no que no es "un buen perdedor".

La pareja real se desplazó en helicóptero desde Los Ángeles hasta Santa Bárbara, ciudad costera del sur de California, para asistir a la cita deportiva benéfica The Foundation Polo Challenge, en la que el primogénito de Carlos de Inglaterra y Lady Di exhibió su habilidad a lomos de un caballo.

"Catalina y yo hemos pasado unos pocos días ocupados, así que la perspectiva de desconectar esta tarde es maravillosa para mí", comentó el príncipe, de 29 años, en un breve discurso realizado en las instalaciones del Santa Barbara Polo and Racquet Club, un centro de prestigio internacional para la práctica de esa actividad ecuestre.

Preguntado sobre si tenía previsto regresar a esa urbe californiana en un futuro, el duque de Cambridge aseguró entre bromas que dependería del resultado del encuentro. "No soy un buen perdedor", manifestó el segundo en la línea sucesoria al trono de Inglaterra.

El trofeo, de manos de Catalina

Uno de los alicientes para los tres equipos que participaban en la competición era que la duquesa de Cambridge, Catalina Middleton, que llegó al evento con vestido de seda plateado y pintado a mano de la diseñadora Jenny Packham, era la encargada de entregar el premio al ganador, un trofeo de la joyería Tiffany & Co., que patrocina el evento.

La cita con el polo congregó a más de 1.200 personas en las instalaciones del club californiano, que celebra su centenario, entre ellas caras conocidas de la pantalla como Rob Lowe, Jennifer Love Hewitt, Rosario Dawson, Zoe Saldaña o el cantante Joe Jonas, del grupo Jonas Brothers.

Un grupo selecto de invitados, que abonaron 4.000 dólares por su localidad, tuvieron acceso a la alfombra roja del acto, un asiento en la comida privada servida por la chef Giada De Larentiis y la posibilidad de conocer en persona a la pareja real. La entrada más barata se fijó en 400 dólares y dio acceso a la grada general. La recaudación del evento irá a parar a la organización The American Friends of the Foundation of Prince William and Prince Harry.

Cena de etiqueta con las estrellas

Los duques de Cambridge regresarán tras esta cita con el deporte a Los Ángeles, 150 kilómetros al sur de Santa Bárbara, para acudir a una cena de etiqueta con todo el glamour de Hollywood en el teatro Belasco del centro de la ciudad. Jennifer Lopez, Marc Anthony, Zac Efron, Jack Black, Nicole Kidman, Tom Hanks o Barbra Streisand son algunos de los famosos que desfilarán por la alfombra roja del evento organizado por la Academia Británica del Cine y la Televisión para dar a conocer a los magnates del cine a los nuevos talentos artísticos de Reino Unido.

Guillermo y Catalina aterrizaron el viernes en Los Ángeles en un vuelo procedente de Calgary, en Canadá, país en el que iniciaron su gira norteamericana el pasado 30 de junio. Durante su primera jornada en California, los recién casados participaron en un encuentro empresarial en un conocido hotel de Beverly Hills con el objeto de fomentar las relaciones económicas entre Reino Unido y EE UU, y posteriormente acudieron a una recepción en su honor en la casa consular en Hancock Park. El futbolista David Beckham fue uno de los invitados en a ese cóctel, al que acudió sin su mujer, Victoria, que se encuentra próxima a dar a luz.

La pareja real regresará a Reino Unido mañana, después de visitar un centro educativo para menores desfavorecidos en Los Ángeles, así como una feria de reinserción laboral para soldados.