Ocho de cada diez conductores que han perdido puntos son hombres

A ciertas personas les parecerá que lleva instaurado toda la vida, a otras, que fue ayer. Pero solo han pasado cinco años desde que se instauró el sistema de puntos en el carné de conducir, sin duda la medida en materia de seguridad vial más polémica de cuantas ha tomado el actual Gobierno socialista (ni el límite de los 110 kilómetros por hora ha dado para tanto), pero también a la que más éxitos se le achacan. Entre otros, la reducción de accidentes en las carreteras.

Con esta conclusión, la Dirección General de Tráfico hacía ayer un balance positivo de este quinto aniversario que se cumple ahora, pues los puntos comenzaron a detraerse un 1 de julio -el de 2006-. Los datos presentados con motivo de estos cinco años vienen a demostrar varias cosas: primero que los conductores son por lo general prudentes, pues un 85% de los conductores andaluces mantienen intactos sus puntos (cerca de cuatro millones). En segundo lugar, se desmonta el mito machista que señala a las mujeres como las que peor conducen. Al contrario: el 80% de los que han sido sancionados en carretera en Andalucía son hombres. Y el porcentaje se eleva hasta un 91,4% cuando se habla de aquellos que han perdido todos los puntos del carné, según informaba ayer la Jefatura Provincial de Tráfico de Cádiz.

Infractores hasta el final

Lo tercero que demuestra el balance de la DGT es que los conductores gaditanos que incumplen las normas lo son hasta las últimas consecuencias, con pocos términos medios. Y es que de los 4.314 gaditanos a los que alguna vez se les ha retirado puntos en este último lustro, 3.674 (es decir, el 87%) los han perdido todos y con ellos, el carné.

«Los locos del volante son muy pocos, pero son un peligro de la carretera», explicaba ayer el jefe de Tráfico en Cádiz, Luis Javier Herrero, que consideraba que en este sentido el carné por puntos también cumple con sus objetivos: «Castigar al reincidente y reeducar al resto de conductores». Como recuerda Herrero: «El conductor normal y prudente, al que le pillas en un renuncio y comete una infracción, cuando recibe el aviso -la primera pérdida de puntos- toma precauciones y no lo vuelve a hacer». Los insensatos no, pero se les puede quitar el permiso de conducir.

El objetivo de la reeducación se pone en práctica en los cursos de tráfico que el sistema prevé para que los infractores puedan 'repescar' los puntos perdidos. En estos cinco años, 1.181 conductores gaditanos asistieron a estos cursillos de recuperación parcial (para obtener entre cuatro y seis puntos) y otros 2.710 a los cursillos de recuperación total del permiso. Sin embargo, no todos lo hicieron de manera voluntaria, ya que a 1.561 personas les tuvo que enviar un juez como parte de una condena.

En definitiva, Herrero considera que el carné por puntos «ha sido una herramienta eficaz y uno de los elementos que más ha contribuido a la bajada de siniestralidad en las carreteras» en los últimos años. Aún así, el jefe provincial de Tráfico recuerda que «no se puede bajar la guardia». No en vano, esta bajada en la siniestralidad se ha estabilizado en este último año y el número de muertes en accidentes se ha equiparado con la de hace un año (16 personas han perdido la vida en lo que llevamos de 2011). Aún así, la diferencia que existe con 2005, el año anterior a la imposición del carné, es increíble: entones murieron 95 personas en la provincia.