Las buenas vibraciones de Massa marcan una jornada aciaga para Fernando Alonso

Pocas pruebas y muchas dudas. Así se puede resumir la primera jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Gran Bretaña, tras una jornada marcada por la lluvia que apenas ha permitido a los equipos saber hasta qué punto les han afectado las prohibiciones y limitaciones que se estrenaban en este circuito.

El mejor tiempo de Felipe Massa, 1:49.967, en la segunda tanda de libres, se quedó en algo anecdótico, ya que está previsto que llueva más a lo largo del fin de semana, aunque la carrera se dispute con buen tiempo. El que más escondido estuvo en este primer día fue Sebastian Vettel. El alemán, máximo favorito no solo para la carrera sino, evidentemente, para la victoria en el Mundial, fue sido decimotercero y decimoctavo, y al final de la sesión se mostraba un tanto apesadumbrado.

Con la lluvia fue Webber el que dominó prácticamente todo el día, pero a falta de unos pocos minutos la pista mejoró y los tiempos cayeron de manera fulgurante. Suyo fue el mejor crono de la primera tanda.

Alonso fue uno de los tantos perjudicados por la lluvia. Sin apenas poder probar ni en los primeros ni en los segundos, se bajó del monoplaza cuando mejoró la pista y, tras haber rodado unos cuantos giros con neumáticos intermedios, se acabó quedando con el decimoquinto tiempo de la jornada.

Estrenaba fondo plano y algunos retoques en el alerón trasero, pero con la lluvia poco más se pudo ver. El español, además, tuvo algunos problemas al inicio de la jornada, con un trompo sin consecuencias debido a la gran cantidad de agua acumulada.

Posiblemente, este viernes haya sido el menos productivo de esta temporada. Prueba de ello es que Alonso solo rodó 16 vueltas en la primera tanda, y en la segunda apenas dio ocho.

«Not bad for second drivers»

Si hubo una frase que marcó este GP el año pasado fue la pronunciada por Mark Webber al entrar en meta en primera posición: «Not bad for a second driver». Aquella pequeña 'rajada' muestra del ambiente que se vive en el seno de Red Bull. Viene a cuento de que, precisamente, fueron los teóricos segundos pilotos del equipo campeón y de Ferrari, el subcampeón, los que lideraron la jornada. Y mientras, en Toro Rosso la jerarquía de los pilotos no está tan clara. Sebastian Buemi se quedó a poco más de una décima de Jaime Alguersuari en los primeros libres, pero en los segundos se resarció a gusto. Con ese cuarto de hora sobre seco le bastó para conseguir el décimo puesto, mientras que Jaime, que había sido el más rápido justo antes del parón por la lluvia, se tuvo que conformar con el 14º.

Daniel Ricciardo, piloto del Hispania Racing, también dejó un buen sabor de boca.