Los camioneros también pagarán en las autovías españolas
José Blanco promueve los peajes para transportistas en las principales carreteras, para financiar su conservación
MADRID.Actualizado:Los transportistas preparan ya la cartera para hacer frente a nuevas cargas fiscales. Eso sí, oficialmente no habrá ninguna subida de impuestos, solo la simple transposición de una ley europea.
El ministro de Fomento, José Blanco, confirmó ayer que España implantará «de forma gradual» a partir de la próxima legislatura la 'euroviñeta', el canon que ya pagan los camioneros en varios países de la UE por circular por las autopistas y autovías. Como temían los transportistas, el Gobierno ha sucumbido a la tentación de aumentar los ingresos, y pese a los anuncios de los ministerios de Fomento e Industria, que meses atrás descartaban esa imposición, el cobro será un hecho.
Blanco recordó que Francia impondrá esos peajes ya a partir del 1 de enero, y por tanto tendrán que pagarlos los camiones españoles que atraviesen el país vecino. Y justificó su instauración por la necesidad de conservar las carreteras.
«España tendrá que implantar, porque se ha aprobado en la Unión Europea (UE), la 'euroviñeta', que será de forma gradual». «No se hará de aquí a las próximas elecciones generales, se tendrá que hacer en la próxima legislatura», declaró el responsable de Fomento.
El ministro intentó desvincular la medida de cualquier motivación recaudatoria y quiso llevar el debate al terreno de lo justo o lo injusto. Explicó que la decisión, «aparte de tener un sentido ecológico, quien más contamina es quien más paga, va a permitir que quien más deteriora nuestras carreteras pueda contribuir también a su conservación». Y añadió que sin su instauración «los franceses van a poder deteriorar nuestras autovías y no contribuir y nosotros los españoles tenemos que contribuir al mantenimiento de las autovías francesas». «No es justo ni equilibrado», concluyó.
Blanco se reunirá en otoño con los responsables autonómicos de transportes e infraestructuras, al efecto de unificar criterios en torno a la financiación y mantenimiento de las grandes infraestructuras terrestres (carreteras y ferrocarril), que cuesta más de 2.000 millones al año. En ese cónclave se debatirá la fórmula de implantación de estos peajes.