Los empleados temen que el próximo día 15 no cobren sus salarios

Además de la amenaza de cierre, sobre los 396 empleados de Cádiz Electrónica se cierne otra espada de Damocles: percibir los sueldos. La fecha de cobro son los días quince de cada mes y si bien en junio no hubo problemas -la noticia del cerrojazo fue el día 23- en julio no lo tienen tan claro. «Como llegue el día quince y no cobremos, habrá serios problemas». Rosa Amador, representante sindical de UGT en el comité de empresa confirmó que en la plantilla hay bastante nerviosismo. «Como nos anunciaron el cierre de un día para otro y no nos dejan trabajar, tememos que tampoco cobremos». Según Amador, la gerente de recursos humanos les ha trasladado que las nóminas están aseguradas. «Pero hasta que no lo veamos no lo creeremos».

Por otro lado, tras el 'apagón' de los servidores que realizó la multinacional el mismo día que anunció el cerrojazo en la planta, las máquinas no han vuelto a funcionar a pleno rendimiento, algo que contraviene a la ley en tanto en cuanto la empresa está obligada a darles ocupación a los trabajadores mientras estos sigan contratados.

Boicot a la producción

No obstante, Visten no está por la labor de que su planta gaditana continúe sacando adelante la producción, porque de heho ya ha desviado buena parte de la materia prima a China. «Por eso cuando comencemos a producir es muy probable que tengamos que parar porque nos quedaremos sin componentes o sin piezas clave sin las que no es posible seguir».