Esteban González Pons. :: ELVIRA MEGÍAS
ESPAÑA

«El problema del Movimiento 15M es que no sabemos qué cara tiene»

El dirigente opositor sostiene que hasta que no haya elecciones no se comenzará a crear empleo en España Esteban González Pons Vicesecretario de Comunicación del PP

MADRID. Actualizado: Guardar
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Su papel dentro del PP le obliga a cambiar de registro constantemente. Lo mismo tiene que criticar al presidente del Tribunal Constitucional que atizarle verbalmente a Alfredo Pérez Rubalcaba. Esteban González Pons (Valencia, 1964) analiza el espíritu de los 'indignados' a la vez que anuncia que Mariano Rajoy no se sacará ningún conejo de la chistera en el próximo Debate del estado de la Nación.

-¿Por qué Rubalcaba no puede ser vicepresidente y candidato y Aznar y Zapatero sí pudieron ser presidentes y candidatos?

-Los presidentes del Gobierno tienen una responsabilidad genérica. Los ministros tienen una responsabilidad específica. No es lo mismo ser el generalista del Gobierno que ser un especialista dentro del Gobierno. El presidente, cuando es a la vez presidente y candidato, puede a la vez coordinar el Gobierno y presentarse a las elecciones. El Ministerio del Interior o la vicepresidencia del Gobierno exigen dedicación exclusiva 24 horas al día.

-¿Pasa entonces a ser objetivo prioritario del PP que Rubalcaba abandone sus responsabilidades de Gobierno?

-No es un objetivo del PP, es un objetivo de España. Rubalcaba está sirviéndose de los puestos que tiene en el Gobierno para lanzar su candidatura y eso perjudica a todos los españoles.

-Rajoy ha anunciado que los recortes adoptados por los nuevos presidentes autonómicos son un avance de lo que será su Gobierno. ¿Podando plantillas se supera la crisis o el PP hará más recortes?

-No basta solo con hacer recortes. Además, hay que aplicar una política de transparencia y de racionalidad en el gasto. Las máximas de los gobiernos del PP son: obsesión por la creación de empleo y eliminar la burocracia.

-¿Dan ya por presidente a Monago en Extremadura o temen que la presión de la dirección federal de IU logre su objetivo?

-En un sistema parlamentario, hasta que no se vota no se sabe cuál es la decisión de un Parlamento. Lo legítimo y lo normal sería que Monago, que ganó las elecciones, tenga la oportunidad de formar Gobierno.

-¿Espera alguna sorpresa de Zapatero en el Debate del estado de la Nación?

-Zapatero va a usar este debate para despedirse. Es un presidente que va a tener que dedicar muchos más años a explicar su gestión que los que ha estado ejerciendo su responsabilidad, para intentar que se entienda cómo pudo mentir, negar la crisis y ser tan ineficaz. En el debate vamos a vivir una reposición de los grandes éxitos de Zapatero en opinión de Zapatero.

-¿Y de Rajoy?

-Rajoy es un político previsible, seguro, con mucho sentido común y que garantiza estabilidad. En el Debate del estado de la Nación no creo que Rajoy sorprenda a nadie, estará simplemente en su papel, como todo el mundo espera que esté.

-Hace justo un año, Rajoy pidió a Zapatero en el Congreso que adelantara las elecciones. ¿Aún lo creen factible?

-Para que en España haya recuperación económica tiene que recuperarse el prestigio de la política. Mientras no haya elecciones generales no habrá creación efectiva de empleo.

-¿Se ve usted como ministro?

-No me veo como ministro. Me veo en el desembarco de Normandia intentando reconquistar para la democracia la playa de la crisis económica.

-Pero las quinielas sobre quién puede ser ministro comienzan a proliferar. ¿Cree usted que Rajoy está en eso?

-No está en eso. Las quinielas sobre ministros son tan inútiles como las cartas a los Reyes Magos. Son la fantasía de quien necesita soñar una noche. Rajoy va a hacer un Gobierno muy fuerte, centrado, dialogante y austero. Estoy convencido de que saber los nombres de ese Gobierno es menos relevante que conocer los objetivos que piensan lograr.

-¿Hasta dónde cree usted que el Movimiento del 15M es una moda o una filosofía?

-El problema del Movimiento del 15M es que no sabemos qué cara tiene. Es un movimiento que carece de portavoces, dirigentes y de estructura. Por lo tanto, cuando hablamos del 15M no sabemos exactamente a qué nos estamos refiriendo. Hay muchos 15M. Hay uno que se produjo en el mes de mayo, que fue muy moderado y muy interesante, y otro, el actual, que es muy agresivo y muy repetitivo con las consignas de la izquierda extraparlamentaria y de los antisistemas. En el fondo, el 15M puede que no exista y sea solo el sueño de una clase política que está obligada a reformarse y no ha encontrado aún el día oportuno para hacerlo.

-No quisiera hacer de abogado del diablo, pero parece que los políticos han agachado demasiado la cabeza e, incluso, han reconocido privilegios que tal vez no tengan.

-A favor de las críticas a los políticos hay que decir que los que gobiernan no han sabido gestionar la crisis y, al final, los ciudadanos no han sentido que los políticos estaban de su lado cuando han perdido el empleo. Pero también hay que decir, a favor de los políticos, que todos los movimientos autoritarios empiezan por una fuerza política contra el parlamentarismo. Por ello, tenemos que tener claro que defender el parlamentarismo es defender la democracia.

-Entonces, usted cree que los miembros del 15M no estarían en la calle si tuvieran un empleo.

-Hay mucha desazón social porque falta empleo y faltan oportunidades y horizontes, pero también creo que estos jóvenes van más allá. Están acostumbrados a probar una calidad democrática en Internet que no les ofrecemos fuera de Internet. Este 15M más sano tiene mucho de revuelta generacional. Los menores de 30 años viven en un universo digital y, sin embargo, están gobernados por unos políticos mayores de 30 años que somos seres absolutamente analógicos.