Una legislatura complicada para los grandes asuntos

Lo ocurrido ayer en el Salón de Plenos chiclanero podría ser una constante a partir de ahora. Con 11 sobre 25 concejales, el PP no podrá sacar en solitario adelante los grandes asuntos que requieran aprobación plenaria. El PSOE se apresuró ayer a lamentar «la soberbia y prepotencia del alcalde», a quien consideran más interesado «en hacer el papel de víctima que en resolver el asunto». Así, la confrontación está asegurada. Con un Partido Vecinal que ya sabe cómo se las gasta Marín en una negociación para formar gobierno en mayoría que no pudieron cerrar, y una Izquierda Unida que, curiosamente, no renuncia a sus cargos de confianza ni apoya una reducción del gasto municipal, la legislatura no ha hecho más que comenzar. Las primeras medidas tomadas por Marín han sido el refuerzo de las Oficinas de Turismo y el impulso a una auditoría interna. Habrá que ver qué ocurre cuando llegue el turno de los grandes temas.