OPCIÓN: SIGO EN EL CÁDIZ

Ahora parece que va a ganar la llamada opción B. Es decir, que de los tantos grupos interesados para comprar no se ha confirmado nada. Otra tomadura de pelo a los cadistas y se distrae la atención de que no ha habido ascenso. Y llega la opción de darle la gestión deportiva a una persona o grupo, y seguir siendo el máximo dueño del club, pero sin gestionarlo deportivamente. Que arte. Para no dar la cara ante la afición, perfecto. Pero en el tema del dinero, sigo siendo el dueño, por si mejora la cosa y hay dividendos. Hay que reconocer que el máximo accionista del club es un crack negociando y desviando la atención. Pero ojo, que mire el presente y ponga ya el dinero que necesita el equipo para no descender administrativamente, que el día 30 de junio está aquí al lado. Aún así, casi todos los cadistas creemos que lo más importante es lo deportivo, y ahí quiero centrarme de momento. Esta sumisión al Granada y al Udinense puede interpretarse de distintas maneras. La más crítica diría que somos un filial de esos equipos, que nos van a traer los futbolistas que no les sirven o que no tienen nivel para empresas superiores. La más positiva redunda en el hecho del vertiginoso ascenso del Granada a Primera División en dos años y que sería posible también en Cádiz. Y la intermedia,es que el fútbol es caprichoso y no se puede adelantar nada ni a favor ni en contra. Lo que está claro es que otro año va a seguir el señor Muñoz al frente del Cádiz. Que su pretendida venta de momento se ha quedado en agua de borrajas y que quiere seguir recuperando dinero en su pretendida inversión en el Cádiz. Ojo con el señor Pina, porque al igual que tiene luces, tiene sombras como la espantada en el Ciudad de Murcia. De todas formas, el cadismo ya está curado de espanto. Y surge la tradicional pregunta: ¿Más vale malo conocido que bueno por conocer? El tiempo dará o quitará razones.