Un proyecto novedoso cargado de dudas y prejuicios

Bueno, bonito y barato. Esas son las credenciales del Xerez Deportivo 2011/12. Emilio Viqueira ha tenido que tirar de imaginación y de negociación. Puede que algunos entiendan que ha existido cierto amiguismo para configurar el cuerpo técnico una vez que Esteban Vigo dio, como era de esperar, la negativa por repuesta. Las diferencias económicas eran tan grandes como el carisma que dista entre el malagueño y Juan Merino. Precisamente, Viqueira se ha dedicado estos últimos días a dejar claro que primero se deje trabajar y posteriormente se juzgue.

Y es que las mimbres no son las suficientes y hay que tirar de ingenio. Para empezar, Juan Merino afronta su primera experiencia como primer espada después de su paso por Betis y Recre. El linense va a cobrar poco más de 100.00 euros por temporada, de los salarios más bajos probablemente de la categoría. Ese ha sido el impedimento para convencer a Moreno. Al igual que hiciera Viqueira la pasada campaña, el valenciano va a dejar de percibir mucho dinero (tiene una temporada más firmada) cuando hoy rescinda contrato de futbolista y firme el nuevo como segundo entrenador. A final de mes seguirá con sus exámenes para tener el título nacional, pero comienza a hacer las prácticas en su segunda casa. Manuel Oliva, que renueva, y posiblemente Manuel Salado, preparador físico del Xerez B, serán los encargados de completar un cuerpo técnico desconocido, joven, pero con una ilusión tremenda.

Pero la semana arranca con los primeros fichajes. El Xerez cerrará en la jornada de hoy el fichaje por tres temporadas de Tato y tiene la intención de anunciar la cesión de Brian Sarmiento, aunque la caótica situación del Racing ha retrasado una operación que hace un mes parecía estar completamente hecha.