movimiento 15-m

Los 'indignados' de Salamanca denuncian «la violencia represiva e indiscriminada» de la policía local

Una veintena de jóvenes ha pasado la noche frente al consistorio para protestar contra la "corrupción" y para "acompañar" en su investidura a la alcaldesa entrante, Sonia Castedo, del PP, implicada en el caso Brugal

ALICANTE Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Miembros del Movimiento 15-M de Salamanca han denunciado haber sido agredidos anoche por la Policía Local cuando un grupo reducido increpó al todavía alcalde de ciudad, Julián Lanzarote (PP), en las inmediaciones de la Plaza Mayor. Los integrantes de la Acampada de Salamanca, según se recoge en un comunicado hecho público hoy, han criticado haber sufrido "la violencia represiva e indiscriminada" de la Policía Local, cuando protestaban "pacíficamente" contra Julián Lanzarote.

El Movimiento 15-M ha denunciado el "uso de porras y sprays de pimienta", y que además se les ha confiscado "móviles y cámaras de fotos que pudiera dar testigo gráfico". Según las mismas fuentes, hay cinco heridos, si bien, la única imagen recogida, por el momento, y que ha sido difundida por Facebook, es la de una joven con un golpe en la nariz.

Desalojo en Alicante

Por otro lado, una veintena de 'indignados' que han pasado la noche frente a la fachada del ayuntamiento de Alicante para protestar contra la "corrupción" y para "acompañar" en su investidura a la alcaldesa entrante, Sonia Castedo, del PP, han sido obligados a desalojar la plaza a las 7.30 horas, sin incidentes. El desalojo se produce horas antes de que Castedo, una de las implicadas en el caso Brugal, tome posesión de su cargo en un pleno constituyente previsto a partir de las 11 horas.

Los concentrados estaban situados junto a un cartel con el lema 'Indignados. 15-M Alicante', y tenían velas y vestían de luto para simular el entierro de la Democracia y también en protesta por las cargas policiales ocurridas el pasado jueves en Valencia frente a Les Corts Valencianes. Con la llegada de la luz del día, operarios del ayuntamiento han procedido a vallar los accesos a la plaza consistorial y han instado a los 'indignados' a abandonar el espacio y a situarse detrás de las rejas, en la calle Rafael Altamira.

Tras debatirlo durante unos minutos, la mayor parte de los concentrados ha recogido sus pertenencias y ha abandonado por su propio pie la plaza, mientras que varios han tenido que ser cogidos por el brazo por los agentes e, incluso, uno ha sido sacado en volandas. Según los 'indignados' los agentes les han dado como motivo para el desalojo la peligrosidad de ocupar la plaza por unos preparativos de fuegos artificiales.