Un traspaso de poderes con «cordialidad»

Algunos tirones de oreja al anterior delegado de Urbanismo sí que hubo ayer en la rueda de prensa que ofreció Antonio Saldaña a pocos días de tomar el relevo en este departamento, y en la que repitió en un buen número de ocasiones lo de «la falta de garra y de empuje político para evitar el bloque de algunos temas». Pero, en líneas generales, el edil popular también reconoció el buen clima en el que se había desarrollado esta misma semana la reunión con Juan Pedro Crisol para intercambiar impresiones y traspasar poderes.

«Hubo mucha cordialidad, y hasta una actitud proactiva que se tradujo en un informe exhaustivo de todas las áreas de gestión y que el mismo Crisol había encargado a su equipo», narró Saldaña, que insistió en que uno de los grandes valores de esta delegación son sus trabajadores, «una plantilla muy cualificada y profesional que ha hecho un gran trabajo».

Hay que recordar que la cita entre el delegado de Urbanismo saliente y el concejal electo del Partido Popular tuvo lugar al mediodía del pasado lunes día 6 de junio.

Al término de la reunión, Crisol manifestó que «el encuentro ha servido para comentar aspectos de organización interna y de gestión de proyectos». También el delegado de Urbanismo en funciones destacó entonces que el encuentro se había desarrollado bajo un clima de «cordialidad institucional con el propósito de favorecer el relevo de las funciones asignadas».