La falta de apoyo de IU obliga al PSOE a buscar pactos 'in extremis' para suavizar su derrota

Los socialistas han echado mano de los andalucistas para cerrar los últimos acuerdos municipales. Siete alcaldías están en juego a 24 horas de la constitución de los ayuntamientos. La decisión de IU de no apoyar al PSOE ha trastocado todos los planes y ha obligado a la dirección socialista a cambiar su estrategia sobre la marcha. Mientras tanto, el PP juega sus cartas y se marca faroles con los andalucistas en los municipios donde todavía tiene opción de gobierno el PSOE.

Pese a todo, estos movimientos pueden variar muy poco el mapa político municipal, donde la hegemonía del PP es manifiesta desde el pasado 22 de mayo. Los socialistas han pasado de sumar 26 alcaldías en la provincia a tener atadas en estos momentos once. Tratan ahora 'in extremis' de arrebatar La Línea al PP mediante un acuerdo con el PA. Igualmente, buscan la alianza con los andalucistas en Grazalema, El Gastor y Ubrique, al tiempo que dan por hecho las alcaldías de Castellar y Bornos. En el caso de El Gastor, los socialistas también han echado el lazo a la Unión de Centro Gastoreña (UCG). Su representante podría dar la tranquilidad al gobierno socialista. Sin embargo, la cuna del socialismo gaditano, Alcalá de los Gazules, podría cambiar de manos si, finalmente, los tres representantes de IU rompen con la disciplina del partido y deciden apoyar al PP. Esta maniobra dejaría en fuera de juego al socialista Arsenio Cordero.

El teléfono móvil del secretario provincial de PSOE y alcalde electo de Benalup, Francisco González Cabaña, necesitaba ayer tarde doble carga de baterías. Cabaña acudió hasta San Roque para testimoniar el acuerdo de gobierno alcanzado el miércoles por la noche con el PA y el Partido Independiente del Valle del Guadiaro (PIVG) para asumir la alcaldía de este municipio del Campo de Gibraltar. Durante el trayecto, siguió negociando con los andalucistas los apoyos puntuales para conquistar La Línea y Ubrique. Hoy espera la respuesta de esta ronda de contactos.

Se trata de una película electoral totalmente nueva para los socialistas. Jamás habían rodado en estas circunstancias. El PSOE ha sido durante tres décadas el caballo ganador en Cádiz y ahora necesita de apoyos puntuales para salir a flote. Su descalabro se escenificará mañana cuando los ayuntamientos de la provincia queden constituidos y se compruebe como el PP asuma 17 alcaldías frente a las ocho que tenía en 2007. El PSOE ha dejado en el camino catorce municipios, entre ellos Jerez, Algeciras, Vejer, Medina, Chiclana y Chipiona, entre otros. El partido ha perdido 71.094 votos y 82 concejales tras las elecciones.

González Cabaña trataba ayer de tejer alianzas y no claudicar ante el PP. Reconoció que la actitud que demuestra IU con su negativa a apoyar pactos de izquierda «les pasará factura en las elecciones generales y autonómicas del próximo marzo». En su opinión, «la dirección de IU demuestra debilidad con este tipo de medidas y se expone a una maniobra interna contra natura de sus propios representantes en Alcalá». Según Cabaña, «IU actúa más por intereses de partido que generales». El secretario de los socialistas gaditanos acusó a los populares de implantar el «todo vale» en las negociaciones, «incluso con compensaciones a sus aliados con cargos en mancomunidades».

Los datos que ha cosechado el PSOE gaditano las pasadas elecciones son los perores de su historia. En esta ocasión ha recibido el respaldo solo del 24,5% de los electores, que se traduce en 138.788 votos, frente al 39,10% de 2007, que le aportó una cosecha de 209.882 sufragios.

El PP ha batido un récord. El partido se ha convertido en el protagonista indiscutible del mapa político provincial al liderar 17 alcaldías. Recibieron un respaldo las pasadas elecciones del 37,3% del electorado, que se tradujo en 211.218 votos y una cartera de 235 concejales.

La debacle socialista ha tenido un efecto colateral. Los votos han ido a parar a Izquierda Unida que ha recibido 70.112 votos en la provincia, mantiene siete alcaldías, 107 concejales y se ha convertido en llave en una docena de consistorios. Sin embargo, la orden tanto de la dirección regional como de la provincial de no pactar ha descuadrado al PSOE, que ha tenido que buscar otras alianzas.

Los andalucistas también se han hecho fuertes estas elecciones con tres alcaldías, 52.710 votos, 71 concejales y llave en, al menos, de cuatro municipios.