Un debate que para muchos llega «tarde» y tras otra guerra interna

La ejecutiva que tendrá lugar el lunes llega «tarde» para muchos, pues se debería haber celebrado desde su punto de vista inmediatamente después de las elecciones municipales. De haber sido así, destacan que se habría evitado la guerra interna que tuvo lugar la semana pasada, con Francisco Benavent pidiendo públicamente la dimisión de la alcaldesa, la secretaria de Organización, Rosario Cano, y el vicesecretario general del partido, Francisco Lebrero.

Opinan que debería haber tenido lugar la semana pasada para realizar un «análisis inmediato» de la situación, pues «es normal hacerlo aunque se gane». La reflexión para diseñar una estrategia de cara a los próximos cuatro años, con la vista puesta en 2015, ha esperado por tanto demasiado, aseguran. «Lo primero es un diagnóstico para aplicar el remedio», indican.

«La gente necesita el foro adecuado para decir lo que piensa, y si no se reúne se corre el peligro de que se diga públicamente», han llegado a señalar a través de este medio. Un claro ejemplo son las declaraciones de Benavent, aunque otros creen que no tienen justificación ninguna puesto que se ha precipitado.

En cualquier caso, será en poco tiempo cuando por primera vez los de un bando y otro se vean las caras en una ejecutiva que se prevé tensa y donde los críticos podrían pedir a Sánchez que abandone su labor tanto en la oposición como en el partido. Mientras unos culpan a otros de la debacle electoral por no hacer caso de las advertencias, estos a su vez los responsabilizan por el «acoso constante» durante cuatro años, que ha desgastado enormemente la imagen del partido en Jerez.