El Memorial de las Linternas

Cada año, sobre las cristalinas aguas de la playa de Ala Moana, en Honolulu (Hawai), florecen pétalos luminiscentes y flotan sobre pequeños altares de madera negra un sinfín de esperanzados farolillos. Es el Memorial de las Linternas Flotantes de la Fundación Na Lei Aloha, una comunidad budista con Su Santidad Keishu Shinso Ito al frente. Los farolillos buscan recordar a todas las víctimas en el mundo por guerras y desastres naturales. Y la mayor parte de la 'luz' ha ido este año para los fallecidos en el terremoto y tsunami de Japón. La ceremonia es tan sencilla como íntima. Cada asistente lleva su farolillo, escribe en un papel el nombre del ser honrado y un mensaje en la tela del farolillo. «Todavía pienso en ella todos los días», dijo Lori Chong antes de dejar sobre el agua una linterna en recuerdo a su madre, fallecida hace siete meses. Su deseo y el de los miles de asistentes, seguir la creencia budista: alejar en el mar los temores a la muerte y alumbrar el camino al cielo de los espíritus de sus seres queridos.