Juzgan a una vecina de Rota por quemar supuestamente su casa como venganza
La acusada sufría «ideas delirantes» contra los inquilinos del edificio, a los que culpaba de que «le quitaran a su hija»
CÁDIZ.Actualizado:«Tengo que meter fuego a este bloque, por vuestra culpa me han quitado a mi hija, le voy estallar las bombonas de mi casa». Las amenazas contra sus vecinos de Mercedes L. S. se cumplieron el pasado 19 de agosto de 2010, cuando supuestamente incendió el bloque de viviendas donde vivía, en el número 11 de la calle Cristóbal Colón de la localidad de Rota.
Hoy se sentará por ello en el banquillo de la Audiencia Provincial Cádiz, en la Sección Primera, que la juzgará por un delito de incendio y otro de amenazas graves, que están penados en siete años y y seis meses de prisión el primero, y en cinco meses, el segundo. Sin embargo, la pena podría conmutarse por un internamiento en un centro psiquiátrico penal «por un tiempo menor a 23 años», según el escrito de acusación de la Fiscalía, que ha considerado que Mercedes debe beneficiarse de una eximente incompleta, al haber sufrido supuestamente una enajenación mental que «podría haber abolido su capacidad volitiva e intelectiva».
Las amenazas serían, por tanto, frutos de las «ideas delirantes» que padecía Mercedes, obsesionada supuestamente con que sus vecinos eran los culpables de que a ella «le hubieran quitado a su hija». Los mismos delirios finalmente la habrían llevado presuntamente a quemar el bloque.
Eran las 20.30 horas cuando el intenso olor a quemado alertó a los inquilinos de aquel edificio de tres plantas, en el que viven cinco familias. El fuego se originó en el interior de un armario de la casa de Mercedes y se había propagado al resto de habitaciones. Sin duda, el incendio había sido provocado, pues una vez que las llamas se sofocaron, al revisar el ropero, se encontraron dos encendedores dentro.
Daños por 755 euros
Lo cierto es que las llamas ni siquiera salieron de la vivienda, pero aún así «pusieron en grave peligro la integridad física de los demás vecinos del inmueble», según la Fiscalía. Además, una gran nube de humo tóxico «obligó a los vecinos del bloque a abandonar sus casas», continúa el fiscal en su escrito de acusación provisional, en el que recuerda que se registraron daños en la fachada y en el tirador de la puerta de acceso «tasados en 755,70 euros». Un dinero que la Fiscalía quiere que Mercedes restituya. La Policía Nacional la detuvo un mes y medio después del incendio y el juez la envió a prisión provisional.
Además de solicitar el internamiento en el centro psiquiátrico penitenciario, el Ministerio Público pide que se prohíba a Mercedes L. S. que vuelva a vivir en su domicilio de la calle Cristóbal Colón. Pero también que se le imponga una orden de alejamiento de 100 metros del edificio y del resto de los vecinos, no solo de sus casas, sino también de sus lugares de trabajo o «cualquier otro donde se encuentren o sean frecuentados» durante tres años.