Un cuarto con sabor a 'pole'

Fernando Alonso partirá desde la cuarta posición, tras hacer, según sus propias palabras, una «supervuelta» casi perfecta. Mark Webber ha acabado con la racha de su compañero Vettel y saldrá desde la 'pole' en Montmeló. El australiano Mark Webber partirá desde la primera posición de la parrilla del Gran Premio de España, por delante de su compañero, el alemán Sebastian Vettel, en una suerte de pacto entre caballeros que hubo en Red Bull, que ni siquiera lucharon por superarse entre ellos.

La gran sorpresa del día fue Fernando Alonso. Durante todo el día había tenido problemas, debido a que la FIA declaró ilegal a primera hora del sábado el alerón trasero que habían probado el viernes. El español, tras una Q1 y Q2 que no hacían aspirar a nada más que a quedarse por detrás de los McLaren y los Red Bull, realizó una vuelta perfecta, una «superlap» según sus propias palabras para sacarle esas décimas que le faltaban al Ferrari y auparse al cuarto puesto de la parrilla. Incluso podía haberse colado tercero, ya que su tiempo se quedó a solo tres milésimas del de Lewis Hamilton.

El español no podía sentirse más eufórico y no dudó en celebrarlo ante su público como si hubiera logrado el mejor tiempo del día. Incluso en su box se frotaban los ojos al ver en la pantalla el 1:21.964 que había conseguido el bicampeón español, con un monoplaza que, teóricamente, no le daba más que para un quinto y con suerte. «No me lo esperaba para nada. Aunque lo intentara veinte veces o treinta veces durante toda la tarde, no podría repetirla», explicaba el asturiano.

El alerón de la discordia

La reunión de los comisarios de la FIA del viernes no solo sirvió para avanzar que, a partir de Canadá, iba a haber dos zonas de activación del DRS, o para empezar a discutir sobre los polémicos 'difusores soplados' que tan buen resultado están dando en Red Bull. También sirvió para que Ferrari fuera apuntado con el dedo por uno de sus principales y revolucionarios cambios para esta carrera: una hendidura en el alerón trasero que estuvieron probando el viernes y que, en tandas largas, se había mostrado muy eficiente.

La FIA estudió esta pieza con detenimiento y, tras considerar que violaba el espíritu de la norma pertinente (el artículo 3.10.3 del Reglamento Técnico), ordenaron a Ferrari que lo sustituyera por otras. El 'set-up' que habían preparado para Fernando Alonso y para Felipe Massa durante el viernes, a la basura. Tanto en los libres (Alonso marcó el noveno tiempo y Massa el undécimo), como en la Q1 (se vieron forzados a sacar los neumáticos blandos para asegurarse una buena vuelta y no arriesgarse en exceso, como le pasó a Rubens Barrichello) y en la Q2 se mostraron un par de pasos por detrás de McLaren y de Red Bull.

Sin embargo, cuando todo parecía escrito para que Alonso tuviera que salir desde la séptima plaza, sacó de no se sabe dónde ese tiempo que levantó de las gradas -menos pobladas que otros años- a la afición española.

Alguersuari, tras Buemi

Jaime Alguersuari saldrá 13º, nuevamente por detrás de su compañero Sebastian Buemi, que partirá undécimo. El español, que venía con mucha ilusión y ganas a este Gran Premio, se mostró entre satisfecho y decepcionado con lo que había logrado. Por un lado, dijo que las nuevas piezas le podrían hacer luchar por los puntos, pero justo después se quejó de que no se encontraba a gusto con su Toro Rosso y que el balance trasero no era el óptimo para lo que él quería.

Lo cierto es que, por cuarta vez esta temporada, Buemi ha saldrá por delante de Alguersuari, lo que puede añadir presión al barcelonés o una motivación extra, a la que hay que añadir que las altas figuras de Red Bull se dejaron ver por Montmeló, con el jefe supremo de la marca de bebidas, Dietrich Mateschitz, al frente.