La crisis agudiza la discriminación en el trabajo, denuncia la OIT
La obesidad y el tabaquismo se suman a la inmigración y el sexo entre los obstáculos a la contratación
MADRID.Actualizado:Los tres años de crisis han sido devastadores para la economía mundial, pero también han arrollado las políticas de lucha contra la discriminación en el puesto de empleo. Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), los organismos de defensa de la igualdad han constatado que el problema se extiende y han comenzado a tomar formas diferentes. «Estamos poniendo en riesgo los logros alcanzados durante varias décadas», aseguró el director general de la institución, Juan Somavia.
Durante los tiempos de austeridad y recortes económicos los Gobiernos dan menos prioridad a las políticas antidiscriminatorias y apuestan menos por la defensa de los derechos de los trabajadores. Pese a los grandes logros alcanzados durante las últimas décadas, el informe destaca que en la actualidad sigue habiendo grandes diferencias retributivas entre sexos. Y es que las mujeres ganan entre un 30% y un 10% menos que el de los hombres.
Eso sí, la OIT destaca que en los últimos años se ha avanzado de forma ostensible en materia de horarios y políticas dirigidas a la familia. Pero critica que «la discriminación relacionada con el embarazo y la maternidad todavía es un problema común».
El acoso sexual es uno de los asuntos más complicados en el ámbito de trabajo. Las mujeres siguen siendo las más vulnerables, y sobre todo las jóvenes, con dependencia económica, sin pareja e inmigrantes. Pero los hombres también han comenzado a sufrir este tipo de agresiones. Entre los más perjudicados figuran los homosexuales y miembros de minorías étnicas o raciales.
El organismo internacional del Trabajo reconoce que todavía persisten los obstáculos para encontrar un empleo en muchos colectivos. El informe afirma que las personas de origen africano o asiático, los pueblos indígenas y las minorías étnicas sufren mayores dificultades para acceder al mercado de trabajo.
Un número cada vez mayor de hombres y mujeres padece discriminación por motivos religiosos. En el caso de la opinión política los problemas son más significativos en el sector público, donde la adhesión a las ideologías gobernantes puede influir en el acceso a la administración.
Los 650 millones de personas con algún tipo de discapacidad siguen estando entre los más perjudicados a la hora de encontrar un puesto. La OIT denuncia la alta tasa de paro que sufre este colectivo. En los países industrializados han aumentado los escollos que se encuentran para acceder al mercado laboral.
En ausencia de suficientes empleos para cubrir todas las demandas, la discriminación por hábitos de vida se ha incrementado en los últimos años. El tabaquismo y la obesidad pueden ser dificultades adicionales en la contratación.