Arde la batalla por la salvación

Con el Almería y el Hércules ya descendidos, y a falta de dos jornadas para el final de la Liga en Primera División, en la batalla por la salvación están todavía inmersos nada menos que nueve equipos, que hoy se jugarán muchas, sino todas, sus esperanzas de permanencia. Desde Zaragoza (39 puntos) a Málaga (45), pasando por Getafe, Deportivo, Sporting, Osasuna, Real Sociedad, Levante y Mallorca, el objetivo es evitar la única plaza de descenso que queda por decidir. A priori, el que peor lo tiene es el Zaragoza, que ni aun ganando al Espanyol en La Romareda depende de sí mismo, aunque al Getafe, bajo presión en el Coliseum, también está muy amenazado, porque afronta un duelo directo frente a Osasuna -retransmitido por La Sexta- y a los navarros les basta un punto para mantener la categoría.

En una noche salpicada, como siempre que llegan los duelos definitivos, de rumores de maletines, en esta ocasión tampoco faltan las sospechas de amaños, en especial, en el caso del Sporting-Racing, un partido entre equipos de regiones hermanadas que incluso ha sido anulado por las casas de apuestas por las suspicacias y la posibilidad de un resultado pactado. Ya que para el Racing no hay nada deportivo en juego, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha reclamado a la afición del Racing que apoye al Sporting en El Molinón y se ha encargado de recordar que «un gran cántabro (Preciado)» entrena al equipo asturiano y «un gran asturiano (Marcelino)» al conjunto santanderino. Precisamente, en la última jornada de la pasada temporada fue el Racing el que se jugaba la continuidad en Primera ante el Sporting -los cántabros necesitaban ganar y ganaron en El Sardinero-, y Revilla solicitó entonces que los seguidores de Gijón que ya que estaban salvados se uniesen a los suyos.

Además de por jugar en casa y por recibir al Racing, el Sporting tiene motivos suficientes para pensar en asegurarse ya la permanencia, sin esperar a la última jornada, pero también ha reforzado su ilusión el Deportivo, ya que aunque juega en el Camp Nou, el Barça de la resaca de Liga que solo piensa en la 'Champions' ya no puede llegar a su récord de 99 puntos, y la lucha por el 'pichichi' y la Bota de Oro está casi perdida para Messi frente a Cristiano.

Más tranquilos aún deben estar el Málaga, el Mallorca, el Levante y la Real Sociedad, a los que también les valdrá un punto para la permanencia matemática que todos ellos podrían sellar, casualmente, a domicilio. Si no, aún les quedaría un último cartucho en casa. Por tanto, la verdadera pelea por escapar del 'infierno' podría quedar reducida al Zaragoza-Espanyol y al Getafe-Osasuna, «un partido para echarle huevos», según recordó ayer el capitán del equipo azulón, Casquero.

Para el Zaragoza, el choque de hoy se ha convertido en una final. Al equipo de Javier Aguirre solo le vale «ganar o ganar», como dice el mexicano, y esperar que sus rivales pinchen. Su mirada está puesta en ese enfrentamiento letal entre Getafe y Osasuna, cuando el equipo dirigido por Míchel está ahora angustiado por la necesidad y el de Mendilibar a punto de seguir en la élite.