Sociedad

Los oncólogos piden igualdad en el acceso a los mejores fármacos

Los facultativos denuncian que la crisis económica se está notando y que la plantilla de personal sanitario es insuficiente

MADRID . Actualizado: Guardar
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Superar la desigualdad en el acceso a los tratamientos contra el cáncer, determinada en muchos casos por la comunidad autónoma en que se reside, es el objetivo que reivindicaron ayer más de doscientos oncólogos. En el encuentro '360º en Oncología, los especialistas alertaron del peligro que supone que la crisis se lleve por delante la excelencia y calidad acreditadas en este campo.

Para el jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico Universitario de Madrid, Eduardo Díaz Rubio, las disparidades territoriales en la oferta de terapias contra los tumores es un hecho «tangible». Díaz Rubio, que subrayó la obligatoriedad ética de procurar «el mejor tratamiento» a los pacientes, denunció que la oncología no dispone de especialistas y plantillas para una disciplina médica que, aunque joven, soporta una demanda creciente.

Salvaguardar la excelencia y calidad no es un empeño caprichoso. Según Díaz Rubio, los efectos de la contención del déficit a ultranza se están dejando notar en el trabajo diario de los oncólogos. «Tenemos que dedicar más tiempo a los pacientes, informarles mejor y, por tanto, necesitamos tener más recursos humanos y ahora es prácticamente imposible», lamentó.

A juicio de Jesús García Foncillas, jefe del departamento de Oncolología de la Clínica Universidad de Navarra, los pacientes cada vez viven más, de manera que la frecuencia de enfermos en las consultas crece mientras que el personal sanitario que los atiende sigue siendo el mismo. Así las cosas, es irremediable que los servicios oncológicos se saturen.

Investigación

El fomento de la investigación clínica hospitalaria es otro aspecto que suscita el debate. Eduardo Díaz Rubio destacó que en España se está privilegiando la investigación básica en detrimento de la aplicada a la oncología médica, «que es realmente la que interesa al paciente». En este sentido, el experto adujo que los oncólogos no desean la asignación de partidas a proyectos concretos, sino la «creación, mantenimiento y potenciación de las unidades oncológicas».

Según Carlos Camps, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Universitario de Valencia, en pocos años se han dados grandes pasos en la identificación de genes y subgrupos con el fin de personalizar las terapias y hacer que los fármacos sean más eficaces. «La medicina personalizada se está revelando ya como una realidad que no va tardar en implantarse en la práctica clínica diaria como una forma de trabajo y una fórmula de éxito», sostuvo Camps.

Este especialista sostuvo que han de definirse los objetivos de los tratamientos. Está claro que la supervivencia prevalece por encima de cualquier otro criterio, pero también hay que tener en cuenta la calidad de vida de los pacientes. García Foncillas abogó por diseñar el mapa de ruta de la investigación en cáncer que, a su entender, debe implicar directamente a los oncólogos clínicos, que son los que están en contacto directo con los enfermos, e incorporar a esta tarea al paciente.