Los contrastes del barrio que no ha sido bautizado
Reclamo para los turistas y reducto de la infravivienda
CÁDIZ.Actualizado:El centro de Cádiz es más que un barrio, pero al mismo tiempo no llega a serlo. En esta zona amplia que abarca casi toda la parte del casco histórico que no tiene vistas al mar se funden todas las caras de la ciudad. Miseria y opulencia, actividad y hastío, plazas y callejones conforman el panorama diario del centro de la ciudad, el hormiguero de Cádiz.
El centro es el corazón de la vida comercial gaditana, el lugar en el que confluyen las rutas turísticas, la fotografía que se llevan de recuerdo quienes están de paso en la ciudad. Pero junto a las casas palacio, mucho menos visibles, hay fincas que literalmente se caen a pedazos. Augusto Bravo opina que este es el gran problema de la zona centro. «Hay muchas viviendas privadas que se están cayendo. La infravivienda es todavía una realidad en esta zona», dice.
La impresión de los vecinos es que los trabajos de la Oficina de Rehabilitación del Casco Histórico de la Junta de Andalucía han estado más centrados en otros barrios de la ciudad que en este. «Se han realizado algunas reformas, pero otras están empezadas y se han quedado paradas», explica Bravo.
En lo que respecta a la estética de las calles, hablamos de la que quizá sea la zona más cuidada de la ciudad. En los últimos años se han reformado numerosas calles y plazas, tanto con fondos municipales como con dinero del Estado y la Junta. Plazas como Mina, Candelaria o San Francisco lucen al gusto de gaditanos y visitantes. Pepi Belza tiene claro que ve mejor el centro de la ciudad. «Hay más plazas arregladas, más bancos para poder sentarse a descansar..., yo la verdad es que lo veo bien», comenta.
A pesar de todo, a veces lo que falla es el mantenimiento. Eso es lo que piensa Ana Machuca, madrileña asentada desde hace años en Cádiz. «Creo que la suciedad es un problema en muchas calles, no se presta la misma atención a todo el centro. Además, no hay facilidades para poder reciclar. Mi familia lo hace, pero es difícil encontrar bidones para ello, hay muy pocos», comenta.
En este sentido, hay que recordar que tanto PSOE como UPyD han propuesto en su campaña electoral la instalación de contenedores soterrados que facilitarían la recogida selectiva de residuos, mientras que el PP quiere llevar la recogida de determinados desperdicios, como el aceite usado, a la puerta de la casa de los propios vecinos.
Otra de las cuestiones en las que más énfasis están poniendo todos los partidos y que más incomoda a los vecinos es la falta de aparcamientos. Pepi Belza comenta que «en coche es imposible venir al centro a menos que puedas dejar el coche en un 'parking', menos mal que por lo menos se puede andar bien».
Con ella coincide Ana Machuca, que además señala el peligro que supone para los vecinos la cantidad de motocicletas mal aparcadas que hay por todo el centro.
Para solucionar esta cuestión el PP propone la creación de la zona naranja para residentes, mientras que Izquierda Unida aboga por el alquiler de plazas de aparcamiento subterráneo para los residentes del centro.
Cualquier medida es bien recibida, más si sirve para facilitar el acceso de las personas que quieren acercarse al centro para realizar sus compras. Para los comerciantes este es un aspecto fundamental. En su tienda especializada en artículos de broma y de Carnaval, Ramón Gómez, 'el Millonario', advierte de que hay que buscar una solución urgente para la supervivencia del comercio tradicional. «Está todo fatal, la cosa está muy parada. Las franquicias nos han arrebatado toda la clientela a los negocios tradicionales. Encima, todo se ha juntado con la crisis y la cantidad de gente que está sin trabajo», comenta Ramón, a la vez que se lamenta: «La moral está cada día más baja». Quizá la solución pase, como dice Mari Carmen García, por «quitar franquicias y abrir negocios más variados, algo que sea exclusivo. Sería el empujoncito que le hace falta al centro».