El rey destaca ante el emir de Catar el esfuerzo conjunto ante la crisis libia
Don Juan Carlos se jacta de la fortaleza económica de España en presencia del gobernante de uno de los países más ricos
MADRID.Actualizado:José Luis Rodríguez Zapatero viajó hace un mes a Catar en busca de inversiones para España y logró el compromiso de las autoridades cataríes de invertir 3.300 millones de euros, 300 de ellos en cajas de ahorros. Ayer, don Juan Carlos, durante el discurso previo a la cena de gala que ofreció al emir de este país, Hamad Bin Jalifa al-Thani, y de su esposa, Mozah Bint Nasser, defendió el «fuerte crecimiento económico» experimentado por España en las últimas décadas, que ha convertido a nuestro país «en un actor relevante en la escena económica internacional, con empresas punteras en importantes sectores».
El monarca español, que mantiene una excelente relación con la casa real catarí, defendió ante su invitado el acierto de España al haber acompañado «su propia transformación política social con una modernización económica y empresarial sin precedentes». De hecho, apostilló que la visita del emir, que permanecerá en España hasta mañana, supone una excelente ocasión para que «nuestras excelentes relaciones políticas sirvan de acicate» para dar un salto cualitativo en materia de cooperación económica y comercial.
En este sentido, animó a los empresarios y agentes económicos de ambos países a que «ahonden en su conocimiento mutuo y tracen nuevos planes de comunicación». Al hilo de esta reflexión, don Juan Carlos ratificó, en alusión al periplo de Zapatero por Catar, que «nuestras respectivas autoridades tienen el mayor interés en fomentar proyectos empresariales y la inversión recíproca, que a buen seguro redundarán en beneficio de nuestros pueblos».
Ya hay ejemplos en este sentido. Iberdrola dio entrada en marzo a Qatar Holding con la toma del 6,16% de su capital a través de la suscripción íntegra de una ampliación de capital y la compra de acciones en autocartera, que supondrá una inversión total de 2.012 millones de euros.
El rey eludió abordar de manera explícita cuestiones relacionadas con los derechos humanos o los procesos de democratización en países árabes del norte de África. Sí ensalzó la «contribución» de España y Catar al proceso de paz de Oriente Próximo y, sobre todo, la contribución de ambos países, junto con la comunidad internacional, «a los esfuerzos de solución a la crisis Libia, en consonancia con las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas».
En definitiva, se congratuló de las «excelentes» relaciones entre España y Catar, dentro de la dimensión «prioritaria» que el mundo árabe tiene en la política exterior española. «En efecto, el mundo árabe constituye para nuestro país un espacio fundamental de interrelación y de proyección internacional», indicó.
Don Juan Carlos, asimismo, puso en valor la «decidida apuesta por la modernidad» de Hamad Bin Jalifa al-Thani (que, como su esposa, reciben tratamiento de alteza real), que le ha llevado a acometer un «intenso desarrollo económico y social» más allá de las riquezas petrolíferas y de gas que atesora el subsuelo de este país. Recordó, por ejemplo, las inversiones en diversos sectores productivos e hizo alusión a los «medios audiovisuales de comunicación». Cabe recordar que la cadena de televisión Al Jazeera, la más prestigiosa del mundo árabe en el exterior, es catarí y ha jugado un papel decisivo, por ejemplo, en las recientes revueltas en Egipto, Túnez, Libia o Yemen.
Felicitación por el Mundial
El jefe del Estado encontró en el deporte otro ejemplo de los vínculos entre España y Catar. Durante el ágape oficial, que se celebró en el Palacio Real, el monarca felicitó «muy cordialmente» al emir de Catar por la reciente designación de país anfitrión Mundial de Fútbol de 2022, competición a la que también aspiraba nuestro país.
«La afición de nuestros pueblos por el fútbol contribuye sin duda a fomentar la viva corriente de simpatía que une a nuestros ciudadanos», expresó. José Luis Rodríguez Zapatero recibirá hoy en la Moncloa al emir Hamad Bin Jalifa al-Thani.