Aguirre pone en apuros a Rajoy con la defensa de las listas limpias de imputados
Mantiene, contra el criterio de su partido en Valencia, que más allá de las responsabilides penales existen las políticas
MadridActualizado:Esperanza Aguirre puso letra a la música que muchos dirigentes territoriales del PP tararean desde hace semanas tras la decisión de la dirección nacional del partido de tolerar que Francisco Camps, imputado por un presunto delito de cohecho impropio, llevase en las listas electorales a otros nueve implicados -dos de ellos ya acusados formalmente- en procesos judiciales por corrupción.
«Con el lógico respeto a la presunción de inocencia penal, creo que cuando un juez sospecha que un político ha utilizado su cargo para su proyecto personal existen responsabilidades políticas que hay que sustanciar y así lo hemos hecho en el PP de Madrid y esta lista es otra prueba de ello», sentenció ayer la presidenta de la Comunidad de Madrid tras presentar su candidatura para las elecciones autonómicas del 22 de mayo.
Aguirre demostró otra vez que, más que un verso suelto, es todo un romance sin fin en su formación. La lideresa, con estas declaraciones, pone en aprietos a Mariano Rajoy, Dolores de Cospedal y Ana Mato, que han defendido que la presunción de inocencia es suficiente para mantener a un candidato a la espera de conocer la sentencia firme. Pero la presidenta del PP de Madrid fue más allá al asegurar que los ciudadanos «entienden» y «agradecen» la decisión de dejar fuera de juego al exconsejero de Deportes, Alberto López Viejo, al diputado regional Alfonso Bosch y el exportavoz adjunto del PP en la Asamblea, Benjamín Martín Vasco.
Ambos dejaron el grupo parlamentario tras ser imputados en el 'caso Gürtel' y también fueron expulsados del PP madrileño. De hecho, esos son los únicos cambios que ha acometido Aguirre en relación con los compañeros de viaje electoral que llevó en la convocatoria de hace cuatro años. «Yo pienso, como mi admirado José Mourinho, que si un equipo gana no hay por qué cambiarlo», apostilló.
Estas listas limpias son, por otro lado, la tónica del PP en la mayor parte de España, salvo en Valencia y en otros casos de municipios menores.
Otro caso «ejemplarizante» es el de Baleares, donde el presidente regional de los populares, José Ramón Bauzá, se ha enfrentado a toda la vieja guardia del partido -entre ellos a cargos públicos de la etapa de Jaume Matas- para imponer su criterio de no contar con ni un solo imputado en las listas electorales.
Las palabras de Aguirre llegaron a la reunión de la dirección nacional del PP y Cospedal trasladó el mensaje oficial: «Ya está todo dicho sobre la lista de Valencia». Fue la única respuesta que ofreció la secretaria general del PP cuando fue preguntada por las palabras de Aguirre.
Sin embargo, la firmeza con que la presidenta del PP madrileño ha actuado con los imputados en la candidatura autonómica contrasta con la permisividad en las candidaturas municipales, en las que se pueden contar una docena de salpicados por asuntos penales que nada tienen que ver con 'Gürtel', pero sí con presuntas malversaciones de caudales públicos y supuestos delitos contra la ordenación del territorio.
En cualquier caso, Aguirre sorprendió el 15 de abril al pedir «excusas» a aquellos ciudadanos madrileños que se hubieran sentido «defraudados» por el comportamiento «incorrecto» de algunos miembros del PP, aunque puso el acento en el «plus de credibilidad» que había ganado su formación por la celeridad con la que actuó el PP madrileño a la hora de echar de la formación a los imputados.
«No nos hemos andado con componendas», aseguró Aguirre no sin recordar también que el PSOE de Madrid sigue contando en sus filas «no ya con imputados, sino con condenados».