Un incendio en Cerrofruto obliga a desalojar un edificio por riesgo de derrumbe

Los vecinos de los pisos inferior y superior han sido desalojados ante el riesgo de que la estructura pueda venirse abajo .El fuego arrasa una vivienda y obliga a evacuar un bloque en Cerrofruto .Las llamas calcinaron ayer una vivienda de la barriada de Cerrofruto. Efectivos del Consorcio de Bomberos en el Parque de Jerez intervinieron en el mediodía de ayer en el control y extinción de las llamas registradas en la casa, de unos 40 metros cuadrados, situada en una cuarta planta del bloque 17 del citado barrio.

El incendio, informó el Consorcio, se localizó en un dormitorio donde se almacenaba gran cantidad de ropa. La carga de calor generada hizo estallar puertas y ventanas y favoreció la propagación a la totalidad de la vivienda. Localizado el foco, se controló en 10 minutos y se procedió a controlar la extinción. Mediante una ventilación positiva se frenó además su propagación, que ya empezaba a afectar al resto de viviendas.

Los vecinos fueron además evacuados una vez controlado el riesgo. Respecto a la vivienda incendiada, se encontraba vacía, informaron además los Bomberos.

El servicio de los Bomberos comenzó a las 13.20 horas, con el aviso a la Sala de Emergencias del 085. Hasta el lugar se desplazaron 11 Bomberos del Consorcio en el parque de Jerez con cinco vehículos. Cuando los efectivos llegaron al lugar parte de los vecinos se encontraban en el exterior. Parte del operativo se adentró en la vivienda, equipados con equipos de respiración y cámara térmica, y localizaron el fuego en un dormitorio donde se almacenaban gran cantidad de ropa y enseres.

Explosión por el calor

La carga de fuego y calor fundió ventanas e hizo estallar los cristales, produciendo un 'plash over': cuando se rompen los cristales y existe contacto brusco entre dos temperaturas muy diferenciadas, se produce una deflagración que hace que entre en combustión todo lo que se encuentra en la zona con carga de calor, en este caso en el interior de la casa todo comenzó a arder. Los Bomberos atacaron el incendio y confinaron la zona. Fue necesario utilizar 1.500 litros de agua.

Hasta el lugar de los hechos se desplazó una dotación total de 11 efectivos con dos autobombas urbana pesada (U-40 y U-32), una autoescala (E-19) y dos vehículos de mando y apoyo logístico (M-35 y M-36). Los Bomberos emplearon en su actuación diez Equipos de Respiración Autónoma (ERAs), cámara térmica, tres mangueras de 25mm, 1.500 litros de agua, un turboventilador y herramientas de mano.

Una vez extinguido el incendio, los Bomberos inspeccionaron la zona. El material quemado y mojado constituye un sobrepeso sobre el suelo de la vivienda afectada, por lo que se procede a sacar al exterior parte del mimo. La carga de fuego y las calorías alcanzadas han dañado el techo de la casa -una vivienda de mas de 50 años- afectándo a la armadura y el forjado oxidado del mismo.

Una vez presente personal de Urbanismo en el lugar, se decide el desalojo de la vivienda superior y la inferior por posible riesgo de caída o desplome de la techumbre.