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Tribunales

El SAS deberá indemnizar con 220.000 a un paciente por un error médico que le costó la pierna

Al hombre, de 67 años, se le gangrenó la extremidad por un problema sanguíneo, pero le diagnosticaron artritis

Miguel Domingo García
CádizActualizado:

El juez de lo Contencioso-Administrativo número 9 de Sevilla ha condenado al SAS a indemnizar con 220.000 euros a un vecino de Chiclana, Jacinto Leal, que fue paciente del hospital de Puerto Real, por una negligencia médica en el diagnóstico que le costó al hombre, de 67 años, la amputación de su pierna izquierda.

Durante cuatro años, desde que en marzo de 2008 interpusiera una demanda patrimonial contra el SAS el abogado del Defensor del Pueblo, Luis Ortiz Miranda, Leal ha pleiteado en los tribunales. A los dos años, al no recibir respuesta, acudieron a la vía de lo Contencioso Administrativo que finalmente les ha dado la razón.

"El médico no levantó ni la cabeza para mirarlo", explicaba esta mañana Josefa, hermana de Jacinto, en el despacho de Luis Ortiz, donde presentaron la sentencia condenatoria, que considera probado que las pruebas diagnósticas que se le practicaron al paciente fueron "claramente insuficientes". Apenas se le hizo una radiografía, con la que se le diagnosticó una artritis, se le vendó la pierna con un vendaje compresivo y se le envió a su casa. Al cabo de los siete días, Jacinto notó que la pierna olía mal y que estaba fría. Estaba gangrenada, por lo que fue necesaria la amputación.

Jacinto tenía antecedentes médicos de problemas de arteropatía crónica. "Sólo tenían que mirar el ordenador", afirmaba esta mañana el abogado, que admitió que los servicios de Urgencias suelen estar colapsados, pero considera que no debe ser excusa para una negligencia como esta. "Mi cliente venía derivado del centro de la Longuera, en Chiclana.

El SAS defendió ante el tribunal que la amputación habría sido necesaria incluso si el diagnóstico hubiese sido el correcto. Sin embargo, según recordaba una de las cuatro hermanas de Jacinto, en la segunda visita al hospital le reconocieron que "si hubiera llegado dos días antes, le habrían salvado la pierna".