Prohibido pensar en los clásicos antes de Londres
El Madrid intenta convencerse de que la visita a White Hart Lane no es una simple escala hacia Wembley
MADRID.Actualizado:Medir los tiempos, no adelantarse a los acontecimientos y desconfiar siempre de los equipos ingleses. Con esas tres claves afronta el Real Madrid el duelo de hoy en White Hart Lane. El 4-0 del Bernabéu debería convertir la visita al Tottenham en una simple escala hacia la final soñada de Wembley. Pero el portugués José Mourinho lucha contra la mentalidad funcionarial mal entendida y, desde que acabó el primer asalto, remarcó que todo duelo en feudo inglés es peliagudo por el carácter, el coraje, el ímpetu y el orgullo de sus equipos.
'Mou' está a punto de ser el primer técnico que en ocho años conduce al Madrid a 'semis' pero huye de la relajación. Si pudiera controlar las mentes de sus jugadores, les prohibiría pensar en el Barça, en el carrusel de clásicos que se avecinan. Tras perder virtualmente la Liga ante el Sporting, comunicó a sus jugadores que los necesita a todos y que repartiría minutos en abril. La jugada le salió perfecta en San Mamés, pero es difícil pensar que en Londres el equipo se aleje mucho del titular. El trivote está en su cabeza para contrarrestar el fuerte ritmo que, supuestamente, querrá imponer el Tottenham. La ausencia de Lass por una sinovitis en la cadera izquierda abre las puertas de la titularidad a Granero, junto a Khedira y Xabi Alonso.
La amenaza de sanción por tarjetas preocupa, y mucho. Ramos, Carvalho, Albiol, Di María y Cristiano se perderían el primer asalto de semifinales. Es probable que alguno descanse. Vuelve a la lista Benzema, tras superar una lesión muscular, y aparece el chaval Nacho Fernández, hermano del mediocentro del filial Álex Fernández, que ya debutó esta temporada con Mourinho. Además de Lass, no estarán Pedro León y Gago, también lesionados, y Pepe, sancionado.
«Cinco goles no les servirán»
«Tenemos que respetar al Tottenham y al fútbol. A veces, este deporte te traiciona y no le puedes dar la oportunidad de hacerlo. Por eso venimos a jugar a Londres muy serios. Cinco goles serían insuficientes para ellos porque el Madrid va a marcar», aseguró José Mourinho en la previa del partido. El luso elogió de nuevo la 'mentalidad inglesa' y garantizó que si estuviera en la piel de Redknapp, haría «lo posible para intentar el milagro».
Sufren los 'Spurs' la baja del 'espárrago' Peter Crouch, expulsado por dos amarillas en el primer cuarto de hora del choque del Bernabéu y criticado después por 'lechuguino'. El técnico baraja dos opciones. Salir con el ruso Pavlyuchenko y el veloz Jermain Defoe juntos en ataque o bien decantarse por uno de ellos, con Van der Vaart como enganche.
El inexperto pero voluntarioso Tottenham apela a los viejos tiempos para soñar con el milagro. Como el protagonizado por el equipo de Bill Nicholson en la campaña 61-62. Llegó a ir perdiendo ante el Górnik Zabrze por 4-0 en la ida y en el pequeño infierno de White Hart Lane abrasaron a los polacos con ocho goles. Pero cualquier semejanza entre ese equipo y este Madrid es un insulto. Redknapp confía en la plena recuperación del zurdo galés Gareth Bale, quien jugó muy mermado en la ida, y en la profundidad por la derecha de Aaron Lennon, quien no participó en Chamartín. Son dos puñales para los costados.